GOLPE DE ESTADO EN BOLIVIA: RENUNCIÓ EVO MORALES

GOLPE DE ESTADO EN BOLIVIA: RENUNCIÓ EVO MORALES

Por María Evelyn Sigot Pavon

El presidente de Bolivia, Evo Morales, anunció este domingo la convocatoria a nuevas elecciones, “que mediante el voto permitan al pueblo boliviano elegir democráticamente a sus nuevas autoridades, incorporando a nuevos actores políticos”, expresó públicamente el mandatario. Este llamado se dio en medio de un golpe de Estado orquestado por la oposición, mientras organizaciones y sindicatos agrarios salen a las calles a apoyar al presidente.

La Organización de los Estados Americanos (OEA) a través de un comunicado instó a anular los resultados de las elecciones del pasado 20 de octubre en Bolivia y convocar nuevos comicios. Por ello y a instancias de lograr la paz en Bolivia, «he decidido, primero, renovar la totalidad de vocales del Tribunal Supremo Electoral. En las siguientes horas la Asamblea Legislativa Plurinacional, en acuerdo con todas las fuerzas políticas, establecerá los procedimientos para ello«, declaró Morales.

En el perfil de Twitter, el presidente de Bolivia subrayó: “Mi pedido al pueblo boliviano es garantizar la convivencia pacífica y acabar con la violencia para el bien de todas y todos. No podemos estar enfrentados entre hermanos bolivianos (…) Al convocar a nuevas elecciones nacionales garantizamos que el pueblo de manera libre, democrática y pacífica, mediante el voto, elija a sus nuevas autoridades incorporando a los nuevos actores políticos”.

Después de conocerse que, tanto la Central Obrera Boliviana (COB) como las Fuerzas Armadas, le quitaban el apoyo a Evo Morales y luego de incrementarse las acciones violentas por parte de la oposición, el presidente presentó su renuncia. Según informó, la decisión responde a la urgencia de frenar la violencia contra lxs dirigentes sindicales, de los movimientos sociales y de lxs militantes del MAS. “Tengo la obligación de buscar la paz”, culminó.

En ese marco, miembros del gobierno fueron amenazados sino renunciaban al gobierno. Estas extorsiones desembocaron en una ola de dimisiones: tres ministros, la vicecanciller y el presidente de la Cámara de Diputados. Al cierre de esta edición la presidenta del Tribunal Supremo Electoral, María Eugenia Choque Quispe, fue detenida acusada por el manejo de los últimos comicios.

Al mismo tiempo, el opositor Luis Fernando Camacho ingresó al Palacio de Gobierno con una carta de renuncia para Evo Morales en un mano, y con una biblia, en la otra.

Cronología

El 20 de octubre pasado Bolivia eligió presidente y vicepresidente para el periodo 2020-2025. También renovaron banca más de 130 diputadxs y 36 senadorxs.

Entre las nueve fórmulas presidenciales registradas, Morales lideraba los sondeos con un rango de intención de voto que iba del 34% al 43%, seguido por Carlos Mesa, el ex presidente reconvertido en principal opositor, quien rondaba entre el 22% al 28%.

En la noche de la votación, Morales lideraba el conteo con el 45,28%, sumando un triunfo más, tras 13 años de gestión. Según el Tribunal Supremo Electoral (TSE), la jornada estuvo marcada por una alta participación y calma en los centros electorales. Sin embargo, se registraron inconvenientes en la transmisión de los resultados preliminares, lo que demoró el escrutinio final.

El día después, el TSE otorgaba el 46,4% de los votos a Morales, contra 37,07% para Mesa, con el 95,63% del conteo realizado. La brecha se acercaba a los 10 puntos porcentuales necesarios para ganar en primera ronda. Mesa denunciaba fraude y la oposición orquestaba así hechos que derivaron en incidentes violentos, con incendios, enfrentamientos con la policía y saqueos en distintas ciudades del país andino, dejando como saldo tres muertos y cientos de heridos.

Cabe recordar que, el viernes por la noche, la Cancillería boliviana emitió un comunicado a la comunidad internacional denunciando la organización de un golpe de Estado, mientras que el líder de las manifestaciones, el opositor Luis Fernando Camacho, continuaba incentivando a los grupos de choque y los amotinamientos, coqueteando con un acercamiento al candidato neoliberal  Carlos Mesa.

Camacho es el presidente del Comité Pro-Santa Cruz que nuclea entidades empresariales, vecinales y laborales de derecha. El líder había dado el sábado un ultimátum de 48 horas a Morales para que renuncie mientras que el resto de la oposición, incluido Mesa, coincide con Camacho en el pedido de anular los comicios y la convocatoria a nuevas elecciones.

La jornada más violenta

Un hecho sin precedentes se registró días atrás en Cochala, cuando un joven identificado como Limbert Guzmán Vásquez, de 20 años de edad, falleció tras ser herido gravemente durante los enfrentamientos en Quillacoll. Ante esta situación, la “Resistencia Juvenil Cochala” agredió a la alcaldesa de Vinto por el MAS, quien fue secuestrada, retenida y agredida por sujetos que la liberaron tras obligarla a arrodillarse, bañarla con pintura roja y cortarle el cabello.

«Si quieren matarme, que me maten», expresó la alcaldesa ante las cámaras, rodeada por jóvenes que la sujetaban, con el rostro cubierto con mascarillas. Arce aseguró estar dispuesta a dar su vida por el proceso de cambio, como el oficialismo denomina al movimiento que llevó al poder a Evo Morales en el 2006.

Toda mi solidaridad con nuestra hermana alcaldesa Patricia Arce, secuestrada y vejada cruelmente por expresar y defender sus ideales y los principios de los más pobres. Condenamos las acciones violentas que causan luto y dolor en la familia boliviana”, escribió el presidente Morales en su cuenta en Twitter.