EL FUEGO YA AFECTÓ MÁS DE 1800 HECTÁREAS

Incendio en el Parque Nacional Los Alerces

EL FUEGO YA AFECTÓ MÁS DE 1800 HECTÁREAS

Por PPV 

El comando a cargo del combate del incendio del Parque Nacional Los Alerces, que ya consumió más de 1.800 hectáreas, decidió dividir hoy el área afectada en seis sectores, a raíz de su extensión, mientras que el gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, se comprometió a enviar ayuda para combatir el fuego en el extremo norte de la provincia de Chubut.

El incendio desatado en el Parque Nacional Los Alerces, y otras áreas de la provincia de Chubut, continúa activo «en todos los sectores» y ya afectó en su mayoría de especies nativas.

Anoche, y de acuerdo con el último parte emitido por Parques Nacionales, hoy por la mañana se desplegó una mayor cantidad de personal disponible para el operativo de combate del incendio, «totalizando 131 Brigadistas de Incendios Forestales, con un total de 230 agentes trabajando en el sistema de contención».

Mientras que para hoy se espera un ascenso de temperatura, con una máxima de 25 grados en la zona y vientos del sector Oeste, Weretilneck dispuso los recursos humanos y el equipamiento del Servicio de Prevención y Lucha contra Incendios Forestales (Splif) rionegrino para combatir el incendio, según informó en su cuenta oficial de la red social X.

«Toda la solidaridad de la Provincia de Río Negro con nuestros vecinos del Chubut. Ponemos a disposición recursos que les brinden asistencia y colaboren para combatir los incendios en el Parque Nacional Los Alerces a través de nuestros brigadistas del Servicio de Prevención y Lucha contra Incendios Forestales (Splif)», detalló el mensaje del mandatario rionegrino.

Para el intendente de Los Alerces, Danilo Hernández Otaño, el incendio que se declaró el jueves pasado fue «intencional y es una práctica que se reitera en todas las temporadas desde el 2015».

Otaño sostuvo hoy que «queda clara la intencionalidad porque no ocurrió durante una tormenta eléctrica, ni por un arco voltaico en zonas cercanas a las líneas de alta tensión, ni por un fogón mal apagado en áreas de uso turístico, ni en espacios sujetos a la intervención humana donde se hubiera podido estar llevando adelante una quema de restos forestales producto de la poda o de un manejo silvicultural».

Sin embargo, el gobernador de Chubut, Ignacio Torres, responsabilizó a los integrantes de la Resistencia Ancestral Mapuche (RAM) – en una forma de continuar estigmatizando a los pueblos originarios -de los incendios forestales que se desataron en el Parque Nacional Los Alerces, donde ya se quemaron más de 600 hectáreas.

“La RAM son unos chantas, tienen de mapuche lo que yo puedo tener de sirio libanés. Son delincuentes que tienen un negocio inmobiliario y que hacen estas cosas”, dijo Torres, en diálogo con Radio Rivadavia.

La misma postura manifestó el vocero presidencial, Manuel Adorni, para quien si el incendio en el Parque Nacional Los Alerces «termina derivando en una investigación que indique que fue intencional, los responsables tendrán que estar tras las rejas o extraditados, en el caso de corresponder».

Pese a las acusaciones, no hay indicio alguno sobre dichas afirmaciones, lo que sí existe es un reclamo que vienen impulsando los y las brigadistas que resisten a su vez el ajuste que impulsa el gobierno de Javier Milei.

Ahora, por el Decreto 84/2023 de la actual gestión, su situación se tornó deplorable: solo se les hacen contratos por 3 meses con riesgo de ser despedidos o despedidas el 31 de marzo. Nucleados en ATE, les trabajadores continúan reclamando estabilidad definitiva, pase a Planta Permanente, aumento salarial, jubilación acorde y el fin de de los contratos basura para las y los Brigadistas de Incendios.

Esto mismo le pasa a la mitad de las y los trabajadores de la Administración de Parques Nacionales, unos 1.100 en todo el país. Técnicos y técnicas profesionales en diversas áreas, brigadistas, administrativos y administrativas, trabajadores y trabajadoras con hasta 20 años de desempeño en la conservación de las Áreas Protegidas que ven permanentemente en riesgo su fuente de trabajo.