DISTRIBUCIÓN REGRESIVA: FUERTE TRANSFERENCIA DE INGRESOS DE LXS ASALARIADXS HACIA LXS EMPRESARIXS

DISTRIBUCIÓN REGRESIVA: FUERTE TRANSFERENCIA DE INGRESOS DE LXS ASALARIADXS HACIA LXS EMPRESARIXS

Por PPV

En su último discurso en Pilar, la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner se refirió muy puntualmente a la distribución regresiva del ingreso. Un informe del CEPA (Centro de Economía Política de Argentina) da cuenta que, en el segundo semestre del 2022, se produjo una fuerte recuperación del empleo a la par de un magro desempeño del salario sin posibilidad de recuperación de los puntos perdidos en materia de poder adquisitivo. A la vez, los balances de las empresas más importantes del país muestran fuertes incrementos de rentabilidad operativa. Es decir, la transferencia de ingresos de lxs asalariadxs al sector empresarial es altamente llamativa.

En este sentido, el CEPA toma como referencia la distribución del ingreso entre los años 2016 y 2022 y señalan que, entre el primer semestre del 2016 y el mismo semestre del 2022 la caída asciende a 6,9 puntos. El mayor retroceso se observó en los primeros semestres de los años 2016 y 2019, respectivamente, donde el guarismo retrocede en 4,8 puntos, los 2 puntos restantes se reducen entre los años 2019 y 2022.

Respecto a la participación del capital en el ingreso, el Centro Económico señala que se observó entre el primer semestre 2016 y el primer semestre 2022 un incremento de 5,3 puntos en la participación. Y, a la inversa que en el tema salarial, en el período que corre desde el primer semestre de 2019 al primer semestre del 2022 es donde se produce el mayor incremento: 3,5 puntos.

Es decir, mientras que el poder adquisitivo del salario cayó en un mayor porcentaje durante los años 2016 y 2019, el crecimiento de la participación del capital en el ingreso se dio durante el período 2019 al 2022.

Al tomar la relación entre productividad e ingresos es clara la brecha que se establece entre productividad y el ingreso asalariado real. En el período que venimos analizando, desde el último trimestre de 2019 hasta la actualidad, la productividad laboral subió por puesto un 14%, mientras que los ingresos reales de lxs asalariadxs sólo mejoraron un 2%. Es decir, sostiene CEPA, que el 83% de la mejora de la productividad laboral de estos últimos tres años se lo quedaron las empresas.