CRISTINA: «LO MÁS GRAVE NO ES LO QUE ME PUDO HABER PASADO. PARA MÍ LO MÁS GRAVE FUE HABER ROTO UN ACUERDO SOCIAL QUE HABÍA DESDE 1983»

CRISTINA: «LO MÁS GRAVE NO ES LO QUE ME PUDO HABER PASADO. PARA MÍ LO MÁS GRAVE FUE HABER ROTO UN ACUERDO SOCIAL QUE HABÍA DESDE 1983»

Por PPV

La vicepresindenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, hizo su primera aparición pública luego del intento de asesinato que sufrió el pasado 1º de septiembre y mantuvo una reunión de unos 45 minutos, a puertas cerradas, con curas villeros y hermanas, religiosas y laicas, en el Salón de las Provincias de la Cámara de Senadores.

Durante su exposición, la titular de la Cámara alta señaló que su deseo era que su «primera actividad pública se hiciera con ustedes», tras expresar: «Siento que estoy viva por Dios y por la Virgen». Y agregó: «si tenía que agradecerle a Dios y a la Virgen lo tenía que hacer rodeada de curas con opción por los pobres, con curas villeros y con hermanas laicas y religiosas».

En el encuentro, del que participaron integrantes del interbloque del Frente de Todos, como el neuquino Oscar Parrilli, la formoseña María Teresa González, el entrerriano Edgardo Kueider y el puntano Adolfo Rodríguez Saá, la vicepresidenta se refirió al atentado y a la posibilidad de avanzar en un acuerdo en temas económicos con la oposición.

«Me hubiera gustado estar el otro día en la Basílica de Luján, pero iba a haber mucha seguridad y no quería entorpecer con mi presencia lo que era un momento muy especial», destacó.

La Vicepresidenta también mencionó que, al otro día del intento de asesinato, recibió un llamado del papa Francisco en el que, según contó, el jefe de la Iglesia católica le dijo que «los actos de odio y violencia siempre son precedidos por palabras y verbos de odio y violencia».

«Primero son las palabras y luego ese clima va creciendo y creciendo», denunció Fernández de Kirchner.

También expresó: «Lo más grave no es lo que me pudo haber pasado. Para mí lo más grave fue haber roto un acuerdo social que había desde el año 1983. Yo siento que la recuperación de la democracia no fue solamente que podamos volver a votar y elegir a las autoridades. Yo entiendo que recuperar la democracia fue recuperar la vida. Recuperar la vida, la vida y la racionalidad de que podamos discutir en política, peronistas, alfonsinistas, peronistas renovadores, peronistas tradicionales… Lo que fue la democracia a partir del 83, erradicando esa violencia. Y la verdad que lo que pasó el otro día fue algo más, fue una ruptura. Una ruptura de eso que tenemos que volver a construir urgentemente».

Además, leyó un ejemplar del Diario de Sesiones de 1929 y recordó que el 24 de diciembre de ese año el entonces presidente Hipólito Yrigoyen salió indemne de un intento de asesinato con cinco balazos – uno de ellos hirió al comisario que iba con él- mientras que el agresor fue abatido por la policía.

Contó que finalmente, el 21 de enero de 1930, hubo una sesión en senadores y que el senador radical, Del Valle, pidió la palabra para referirse a lo que sucedió: “Esto lo digo en nombre de la representación radical. Con entera conciencia y tranquilidad. Ese atentado no ha sido sino la consecuencia de la actitud intemperante y desorbitada de la prensa, de partidos y aún, señor Presidente, del mismo honorable Senado. En la misma esquina del domicilio del doctor Yrigoyen se alzó una tribuna de escándalos y amenazas”.

«¿Por qué traigo esto a colación? Y bueno porque me parece que tenemos que examinarnos nosotros mismos, la autopercepción que tenemos los argentinos de nosotros mismos. Y lo que somos, porque siempre hubo grupos, tal vez no mayoritarios, pero sí pequeños, pero de gran poder que quieren suprimir, eliminar al que piensa diferente. Seis meses después de esto Hipólito Yrigoyen era, se producía el primer golpe militar de la historia y se fundaba lo que después se conoció hasta 1983 como el Partido Militar. Esto sucedía en 1930», contó.

Destacó que cuando Sabag Montiel quiso asesinarla «fueron los militantes los que aprehendieron a quien me intentó matar, no la policía».

Agregó que «no solo lo detuvieron, sino que impidieron que, fracasado el primer disparo, lograra montar otra vez el arma».

En ese aspecto, resaltó que «no hicieron justicia por propia mano, sino lo que corresponde a ciudadanos democráticos y cristianos: lo entregaron a la ley», en referencia al arresto civil.

«No creo que tengamos que sancionar ninguna ley especial. Lo que hay que poner es mucha institucionalidad y respeto cívico», alentó.

«¿Se puede reconstruir un país y reconstruir la economía en un país donde solo se insulta y se agravia? Miren, si la economía tiene problemas hay que discutir de números y ponernos de acuerdo discutiendo de números. Es lo más fácil de poder discutir números, es fácil porque dos más dos es cuatro y no hay posibilidades de que sea cinco o seis. En cualquier otra cosa la política, la religión, es lo que cada uno piensa y siente, pero la gran ventaja que te da la economía es que podés discutir sobre números. Entonces, yo creo que cuando se pone tanto adjetivo, tanto insulto y tanto agravio  es porque no se quiere discutir en serio de economía», reflexionó la ex presidenta.

Finalmente, expresó: «Quería estar con ustedes, porque a mí me parece que estando con ustedes estoy un poquito más cerca de Dios y de la Virgen también. Así que gracias por venir y le copié una cosa a Francisco, ahora digo ‘por favor, recen mucho, mucho por mí’, pero recen mucho porque lo necesito. Gracias, muchas gracias».