ACTO DE REPUDIO CONTRA EL ENCUBRIMIENTO JUDICIAL AL ABUSO SEXUAL A INFANCIAS Y JUVENTUDES
Por PPV
El pasado lunes 18 de septiembre se realizó en el Salón Blanco del Congreso Nacional un acto en repudio al encubrimiento judicial del abuso sexual a infancias y juventudes.
Durante el acto, convocado por colectivos feministas y militantes, se firmó un documento que rechaza la absolución por parte del Tribunal Oral en lo Criminal (Toc) n° 3 de Lomas de Zamora, a cargo de los jueces Luis Miguel Gabián, Marcelo Hugo Dellature y Mauricio Salvador Blanco, a Pablo Ghisoni, acusado de ejercer violencia sexual contra sus hijos.
Frente a esta decisión, los dos patrocinios de las víctimas presentarán un recurso frente a Casación para revocar la sentencia.
La definición del Tribunal “es un acto inadmisible de encubrimiento judicial que criminaliza a una madre protectora,a la vez que busca disciplinar todos los cuerpos y voces feministas que buscan visibilizar, detener y reparar las violencias y los pactos patriarcales”, dijeron las organizaciones en la convocatoria que se difundió a través de redes sociales.
“Como feministas y militantes de DDHH (derechos humanos), no podemos permanecer en silencio ante la violencia de género institucional y el adultocentrismo que hoy golpea a Andrea y sus hijos”, expresaron en referencia a la madre de los hijos de del obstetra y ginecólogo PG, por sus siglas.
Además advirtieron sobre “la embestida patriarcal contra las madres/xadres protectorxs”, un nombre con el que se identifica a quienes acompañan a sus hijas e hijos víctimas de violencia sexual, y contra “sobrevivientes de abuso sexual contra la infancia y juventud”.
El caso Andrea Vázquez y sus hijxs y el abuso de su progenitor
La cirujana Andrea Vázquez, “madre protectora” y creadora de la ONG «Sumate Basta de Abusos», lleva más de 10 años de lucha desde que sus hijos le expresaron que sufrían abuso sexual por parte de su progenitor Pablo Ghisoni.
Vázquez comentó en una entrevista a la secretaria de Género de La Matanza que la primera denuncia la realizó cuando Pablo Ghisoni le partió una botella en la boca a su hijo mayor porque le molestaba el ruido que hacía. Tras ese episodio, la madre aseguró que realizó 40 denuncias más pero no fueron tenidas en cuenta.
Andrea Vázquez se separó en 2009 de PG y lo denunció por violencia hacia ella y sus hijos.
Sin embargo, recién cuando volvió a convivir con ellos en 2016 detectó signos de abusos sexuales.
El obstetra, a su vez, la acusó en 2012 de «impedimento de contacto». El Tribunal N°3 de Lomas de Zamora ordenó, entonces, un operativo para que la policía se llevara a los tres chicos de la casa de la madre. Los jueces dictaron la medida bajo el fundamento del Síndrome de Alienación Parental (SAP), algo que fue rechazado por la Organización Mundial de la Salud. En 2013 Vázquez fue absuelta.
La denuncia que llevó a PG al banquillo de los acusados fue radicada por la directora ejecutiva del Comité Argentino de Seguimiento y Aplicación de la Convención Internacional de los Derechos del Niño, Nora Schulman, al tomar conocimiento de la situación del hijo menor de la pareja, que en ese momento tenía 7 años y que hoy ya alcanzó los 14.
En 2019, PG fue procesado por el delito de abuso sexual contra dos de sus hijos y el 8 de febrero pasado, la Sala 3ra. de la Cámara de Apelación y Garantía del Departamento Judicial de Lomas de Zamora le concedió la excarcelación, a la espera del juicio que comenzó el 3 de agosto.
En marco de la denuncia, este 12 de septiembre, se informó la sentencia que absolvió a Pablo Ghisoni por no haber pruebas suficientes.
El colectivo Yo sí te Creo señaló que se desoyó el testimonio de los sobrevivientes tanto en Cámara Gesell como en el Tribunal.
“Una vez más, como fue habitual durante estos 14 años el Estado es responsable de revictimizarles incumpliendo con el debido proceso que estipula el deber de obrar con perspectiva de infancias, de género y de derechos humanos”, declaró el colectivo vía la red social Instagram.
«La decisión de absolver a Ghisoni, es un acto inadmisible de encubrimiento judicial que criminaliza a una madre protectora, a la vez que busca disciplinar a todos los cuerpos y voces feministas que buscan visibilizar, detener y reparar las violencias y los pactos patriarcales», señalan más adelante.
A su vez, plantean que esta sentencia podría continuar con la posibilidad de establecer una revinculación forzada con el perpetrador de las violencias sexuales vividas desde sus 3 años.
El hijo mayor apoya al padre
En carta enviada a Infobae, Francisco el hijo mayor de la pareja quien tiene en la actualidad 22 años y vive con su padre, sostiene que su madre miente y señala entre otras que, «Quiero que todos sepan que no estoy en riesgo. No fui abusado ni amenazado por mi papá. No vivo «en un infierno» como ella dice. Soy libre y escribo esto por elección propia. Lo que sí me hace sufrir es saber que mis hermanos están con ella.» Y subraya que no está dispuesto a mentir.