NO ES UN PLAN, ES UN SAQUEO

Por Ignacio Vila y María Quintero

«El neoliberalismo no es una teoría del desarrollo, el neoliberalismo es la doctrina del saqueo total de nuestros pueblos», afirmaba Fidel Castro allá por el año 1993. La frase pareciera tener más vigencia que nunca en el marco de la Argentina actual. El macrismo da señales permanentes de no tener un proyecto de país con una mirada liberal, como sí lo han tenido sectores conservadores de Chile o Colombia. Todo parece indicar que se trata de un plan de transferencia de ingresos desde el estado hacia un pequeño grupo de la sociedad, que sólo pretende realizar ese traspaso durante todo el tiempo posible. Los aparentes errores de gestión que el gobierno dice tener, no serían más que una serie de ejemplos en los cuales el gobierno fue encontrado “con las manos en la masa” y tuvo que retroceder. (1)

Las respuestas del Presidente en conferencia de prensa tras el escándalo del correo lo dejaron aún más expuesto respecto de su política de negacionismo en el más amplio de los sentidos. Desde Cambiemos se niega con la misma impunidad los 30 mil desaparecidos,  la responsabilidad en causas de corrupción, la culpa de la destrucción de las políticas de bienestar. Niegan incluso a la política y por eso hablan desde su rol de empresarios acusándola de sucia y corrupta.

Y en esta estrategia negacionista es más que claro que el plan de gobierno de Macri y sus asesores es el “No plan de gobierno” fundamentado y disculpado comunicacionalmente en los ya famosos  “vamos construyendo juntos, estamos aprendiendo, volvamos a foja cero”.  Y es aplicado políticamente en la táctica de sólo resolver aquello que le queda a la mano para ganar algo de tiempo mientras continua aplicando políticas de saqueo. El No plan tiene como único plan al saqueo del Estado hasta donde se pueda y de la forma más rápida posible. (2)

La idea de hacer del “no plan” una política y de la “no política” una Pospolítica clara y definida resultó durante el primer año de Cambiemos, sin embargo, la magnitud e impunidad de sus “errores” estarían convirtiéndose para mucho de los integrantes de cambiemos en un “Macri lo hace solo” ya alejado del “Vamos todos juntos”.

A pesar de la vergonzosa protección de los principales grupos mediáticos, el Presidente Mauricio Macri está perdiendo respaldo por parte de una parte de la sociedad que había confiado en el empresario. Los sectores de la Alianza Cambiemos que tienen pretensiones de perdurar en la política piden a gritos al Presidente y a su “mesa chica” que comiencen a “hacer política”, sobre todo en este año electoral. El Jefe de bloque de la Cámara de Diputados de Cambiemos, Emilio Monzó, en variadas oportundades realizó declaraciones públicas, que más bien parecían mensajes directos hacia el Presidente de la Nación. Ya por Septiembre de 2016 afirmaba que “si seguimos así en vez de timbreos vamos a hacer ring raje” e incluso cuestionó duramente al ecuatoriano Jaime Durán Barba asegurando que “tiene muy poca idea de la realidad política de la Argentina”. Los diputados aliados al partido gobernante Mario Negri y Elisa Carrio han criticado duramente al Presidente y su mesa chica por la forma en que se trataron la modificación del cálculo del haber jubilatorio y la condonación de la mil millonaria deuda a la Familia Macri.
Incluso periodistas “independientes” utilizan sus editoriales para pedirle a Macri que cambie sus formas para evitar malos resultados electorales en el próximo octubre. Según Julio Blank, Macri es el responsable directo de haber tomado las decisiones que peor han impactado en la popularidad del gobierno. Incluso se anima a decir, casi de manera desesperada que “a veces es difícil cuidar a Macri de sí mismo”. A confesión de parte, relevo de pruebas. “Nosotros somos mentirosos, pero no magos” podría haber escrito si el periodista fuera un poco menos elegante. En la misma línea, el periodista Joaquín Morales Solá escribió el sábado 19 de febrero un editorial casi desesperado, titulado “Se agotó el margen”, en el cual advierte que “si el Gobierno insiste en conducir el Estado como lo hizo en las últimas semanas, corre el riesgo de perder las elecciones legislativas de octubre”. Está claro que Morales Solá no está despotricando en contra de la transferencia de ingresos desde el Estado hacia un grupo de millonarios, sino más bien les está avisando que no deberían ser tan burdos al momento de hacerlo. Habla de un problema de forma y no de fondo.
Asimismo, parte del periodismo dominante, que se imaginaba vocero de un proyecto de país neoliberal, comienza a darse cuenta de que la inexistencia de ese “No plan de gobierno” los deja afuera de juego también a ellos. A través de sus editoriales creen que podrán hacer despertar a un gigante que ni siquiera se acostó. En su cuenta personal de Twitter la diputada nacional Alcira Argumedo resolvió esta contradicción con una tuit más que descriptivo: “No son liberales, son ladrones. Para entender hay que partir de ahí”.

REFERENCIAS:
1 -. https://revistappv.com.ar/2017/02/08/3048/

2-. https://revistappv.com.ar/2017/02/14/3077/