Portada Cuarta cumbre de la Amazonía

LULA DA SILVA: «ES LA AMAZONIA LA QUE LEVANTA SU VOZ PARA HABLAR CON EL MUNDO»

Cumbre del Amazonas

Portada Cuarta cumbre de la Amazonía

LULA DA SILVA: «ES LA AMAZONIA LA QUE LEVANTA SU VOZ PARA HABLAR CON EL MUNDO»

Por PPV

La Cumbre del Amazonas Unidos por nuestros bosques que se llevó adelante en Belén do Pará en Brasil y en  donde diferentes países buscaban crear una agenda alrededor de la protección de este pulmón ambiental de la humanidad, concluyó ayer miércoles 9 con una hoja de ruta para proteger las selvas tropicales, elogiada como un paso importante en la lucha contra el cambio climático, pero sin los compromisos concretos que pedían algunos ambientalistas para poner fin a la deforestación.

.El martes, presidentes y ministros de ocho países amazónicos firmaron una declaración de sus planes para impulsar el desarrollo económico de sus países y a la vez impedir que la larga agonía de la región “llegue a un punto sin retorno”.

Varios grupos ambientalistas expresaron su decepción con la declaración del martes, que consideraron una compilación de buenas intenciones con escasos objetivos y plazos concretos. Por su parte, la organización indígena más grande de la región se declaró complacida por la inclusión de sus dos reclamos principales.

“Es significativo que los mandatarios de los países de la región hayan escuchado a la ciencia y comprendido el llamado de la sociedad: la Amazonía está en peligro y no tenemos demasiado tiempo para actuar”, dijo el grupo internacional WWF en un comunicado. “Pero WWF deplora que los países amazónicos, de consuno, no hayan llegado a un punto común para poner fin a la deforestación en la región”.

De la cumbre de la Amazonía participaron los presidentes de Brasil y Colombia, Lula da Silva y Gustavo Petro respectivamente, junto a Dina Boluarte, mandataria de Perú; Luis Arce, presidente de Bolivia, los cancilleres de Ecuador, Juan Carlos Holguín, y Surinam, Albert Ramdin; y el Ministro de Guyana, Mark Anthony Phillips.

También asistieron los ministros de Relaciones Exteriores, Álvaro Leyva Durán, y de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Susana Muhamad; el Director del Departamento Administrativo de la Presidencia de la República, Carlos Ramón González, y el Embajador de Colombia en Brasil, Guillermo Rivera Flórez.

El miércoles se sumaron a la reunión los presidentes de la República del Congo y la República Democrática del Congo, un emisario del presidente de Indonesia y el embajador francés en Brasil en representación del territorio de Guyana Francesa. También asistió un emisario de Noruega, el mayor contribuyente al Fondo Amazonas brasileño para el desarrollo sustentable.

Luiz Inácio Lula da Silva, la ministra de Medio Ambiente Marina Silva y la ministra de Pueblos Indígenas Sonia Guajajara, en la Cumbre Amazónica (08.08.2023). Foto: Ricardo Stuckert, Presidencia de Brasil, AFP

“Este encuentro es lo más fuerte que se ha hecho en defensa de la cuestión del clima”, dijo el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, al inaugurar la Cumbre de la Amazonia, el pasado martes, en la ciudad de Belém, capital del estado brasileño de Pará. Agregó que “la historia de defensa de la Amazonia y la selva será resumida en dos momentos: antes y después de la cumbre”. Y subrayó que hasta ahora era el mundo el que daba su opinión sobre la Amazonia, y que, a partir de ahora, “es la Amazonia la que levanta su voz para hablar con el mundo”.

Los representantes nacionales firmaron el miércoles un acuerdo en el que, en una parte de su contenido, criticaba a los países desarrollados por no proporcionar la gran financiación prometida.

Los ocho países que asistieron el martes —Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guyana, Perú, Surinam y Venezuela— miembros de la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica (OTCA) recientemente revivido, han expresado la esperanza de que un frente unido les dé mayor presencia en las conversaciones ambientales globales de cara a la conferencia climática COP 28 en noviembre.

La cumbre refuerza la estrategia de Lula para potenciar el interés mundial en la conservación de la Amazonía. Alentado por una disminución de la deforestación del 42% en sus primeros siete meses en funciones, ha buscado apoyo financiero internacional para la protección de la selva.

En declaraciones a la prensa después de la reunión del miércoles, Lula deploró las «medidas proteccionistas mal disimuladas» como inquietud ambiental que limitan las importaciones de países en desarrollo y dijo que los países desarrollados deben cumplir sus promesas de dar apoyo monetario a la protección de los bosques.

“La naturaleza, que el desarrollo industrial contaminó durante 200 años, necesita que paguen su parte para que podamos revivir parte de lo que se arruinó. La naturaleza necesita dinero”, manifestó Lula.

La Amazonía se extiende por una superficie dos veces el tamaño de la India. Y dos terceras partes de ella se encuentran en Brasil, mientras que otros siete países y un territorio comparten el tercio restante. Históricamente, los gobiernos la han visto como una zona de colonización y explotación, con poca consideración por la sustentabilidad o los derechos de sus pueblos indígenas.

Todos los países presentes en la cumbre han ratificado el acuerdo climático de París, el cual requiere a las partes firmantes establecer objetivos para la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero.

Los miembros de OTCA, que se reúne apenas por cuarta vez en 45 años de existencia, demostraron el miércoles que no están plenamente alineados en asuntos cruciales. La declaración conjunta no incluyó un compromiso compartido, ya asumido por Brasil y Colombia, de reducir a cero la deforestación para 2030.