LA MÁQUINA DE AJUSTAR

LA MÁQUINA DE AJUSTAR

Por Amadora Pajolchek

El pasado jueves 4 de abril, mientras lxs docentes  de varias provincias del país llevaban adelante una  jornada de lucha contra el ajuste y los tarifazos,  el senador Esteban Bullrich, ex ministro de educación, realizaba otra jugada fiel al estilo de cambiemos. Bullrich presentó un proyecto de ley en el senado mediante el cual se intenta reducir y limitar  los días de huelga a lxs docentes a 5 días por año. Esto significaría la modificación del artículo 11 de la Ley 14.786 de Conflictos de Trabajo.

El proyecto ya ingresó en el Senado de La Nación y fue girado a la Comisión de Trabajo. Luego de su presentación, el Senador del PRO declaró en una rueda de prensa que “Ningún derecho es absoluto y el derecho a huelga no debe ser la excepción. Consideramos que limitarlo a 5 días permite la convivencia del bien protegido por la libertad sindical así como el derecho a la educación, ambos de rango constitucional. Así como existe un mínimo de días que el Estado está obligado a cumplir para garantizar el Ciclo Lectivo (son 180 días de clases), debe existir un límite a la huelga a los efectos de poder cumplir con dicha manda”.

Una vez más, el gobierno de Cambiemos evidencia su ensañamiento contra lxs docentes argentinos. Recordemos que ya hace dos años que no cumple con la Ley de Paritaria Nacional Docente, y que el año pasado no sólo no hubo un cierre consensuado de paritarias sino que en La Provincia de Buenos Aires el irrisorio aumento fue por vía decreto de María Eugenia Vidal.  

Si bien el proyecto tuvo un fuerte rechazo de parte de la oposición, como así también de parte los sectores gremiales, no deja de sentar un precedente y un nuevo intento de aleccionamiento de parte del Cambiemos para con los gremios.

Mientras el Gobierno de Cambiemos siguen culpando a lxs docentes de hacer perder días de clases, es cada vez más evidente que es el gobierno quien trabaja día a día en desmedro de la educación y contra los derechos de lxs niñxs: no invierte en políticas educativas, deja que las escuelas se caigan a pedazos -recordemos que el año pasado perdimos a Sandra y a Rubén por un escape de gas – baja la calidad de la comida de los comedores escolares, intenta quitar las becas alimentarias, saca las netbook, cierra escuelas y jardines.

Mientras los comedores escolares están en crisis y la inversión en infraestructura es casi nula, el gobierno opta por presentar proyectos para perseguir a lxs gremios docentes, en lugar de generar políticas que ayuden a la difícil situación que enfrenta la educación pública.