CARNAVAL CON RÉCORD DE TURISMO Y FESTEJOS EN TODO EL PAÍS
Por PPV
El primer fin de semana largo del año, que se estableció con motivo de las fechas de Carnaval, batió un nuevo récord en materia de Turismo. Según informa CAME, en este 2023 se movilizaron un 6,4% más de personas que en el Carnaval 2022 que ya había sido récord.
El turismo local e internacional (Argentina recibió mucho turismo extranjero) dejaron un impacto económico directo de $106.704 millones en alimentos, bebidas, alojamiento, transporte, recreación y compras diversas. Esto representa un 15,3% más, a precios constantes, frente al mismo fin de semana del 2022.
El fin de semana de cuatro días superó incluso los registros de Semana Santa y se estaría posicionando como el más importante y transitado del año, contando el calendario de feriados –sostiene la Confederación Argentina de la Mediana Empresa.
El gasto diario, que promedió los $9.600 por persona, aumentó 14,1% (también medido a precios constantes).
La estadía media fue de 3,8 días, levemente inferior al año pasado (4 días) que responde en parte a la intención de reducir costos, pero también a que se eligieron destinos más lejanos que lo que fue la temporada pasada, cuando todavía el Covid estaba amenazante.
Hay que sumar a ellos la cantidad de turistas que viajaron de una ciudad a otra a presenciar carnavales y espectáculos. Para los empresarios del sector, el feriado fue bueno y se trabajó a pleno. Muchas ciudades colmaron sus alojamientos ya con las reservas previas, sin lugar para quienes llegaron sobre hora.
El éxito de este fin de semana largo genera mucha expectativa a los sectores que viven del turismo en relación al lanzamiento de Previaje 4 que abrirá su inscripción en marzo y podrá ser utilizado durante la temporada baja de mayo y junio.
Los destinos más elegidos fueron las ciudades con tradición de carnaval, como Entre Ríos, Corrientes, Tucumán, Salta y Jujuy, con dos modalidades de festejos muy diferentes entre el Litoral y el Norte argentino. Pero también las ciudades de la costa y el interior bonaerense convocaron gente con sus carnavales, que cada año son más sofisticados.
Polémica con espuma, pero sin pomo
El carnaval, en nuestro país, tiene una tradición histórica y es una fecha muy esperada por quienes se preparan todo el año para sus festejos. Fueron los españoles quienes lo introdujeron en Buenos Aires. Una celebración pagana, pero de origen cristiano, vinculada a los días previos a «limpiar la carne», que desemboca en la prohibición religiosa de consumirla durante los cuarenta días que dura la cuaresma. Hablar de carnaval es sinónimo de alegría comunitaria, algo que la pasada dictadura militar no se podía permitir y por eso fueron prohibidos, incluso llegaron a eliminarlos del calendario oficial de los festejos y, por consiguiente, se detuvieron sus manifestaciones callejeras, lo cual provocó una invisibilización en el ámbito público.
La larga noche que vivimos entre 1976 y 1983 resultó, también, una extensa noche de cenizas.
A partir de 1983, a pesar de que sólo habían sobrevivido una decena de murgas, el fenómeno carnavalesco continuó con mucha fuerza en los barrios y volvió a ganar el espacio público hasta que, en 2010 con el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, se restituyeron oficialmente los feriados nacionales del lunes y martes de carnaval.
Sin embargo, hay quienes parecen continuar atados a la oscuridad de la noche, como el Diputado Nacional por Juntos por el Cambio, Ricardo López Murphy, quien, en una posición totalmente en contra a los corsos que se despliegan en la Ciudad de Buenos Aires, solicitó al Jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta que deje de financiarlos. “No es una actitud festiva, sino que se convierte en una promoción de la actividad política”, afirmó, a la vez que volvió a cuestionar la cifra de las víctimas del terrorismo de Estado, al considerarla “una fake news”.”
Las manifestaciones, que el legislador nacional realizara desde su cuenta de Twitter, fue en respuesta a la actuación de Los Fantoches de Villa Urquiza (que nació en el año 1933) quienes reivindicaron con su canto las figuras de Eva y Juan Domingo Perón, Néstor y Cristina Kirchner, además de recordar a las víctimas del ARA San Juan y a lxs 30 mil desparacidixs.
“Razones para que CABA deje de financiar a corsos: son un gasto superfluo, cortan las calles, molestan a los vecinos y, como si fuera poco, son utilizados para bajar línea política kirchnerista. Basta de financiar tonterías. P.D: no fueron 30.000.” –escribió provocativamente.
A López Murphy le dijeron “si es carnaval apretá el pomo”, pero no consiguió mojar a nadie. Las cifras más arriba mencionadas y los cientos de miles de personas que participaron de los diferentes corsos en la Ciudad de Buenos Aires, dieron cuenta de su éxito y de la importancia de su presencia, aun cuando la Subsecretaría de Seguridad Ciudadana y Orden Público, dependiente del ministerio de Seguridad, junto a la cartera de Espacio Público que conduce Clara Muzzio, decidieron suspender los corsos de Saavedra y Villa Lugano.
Razones para que CABA deje de financiar a corsos: son un gasto superfluo, cortan las calles, molestan a los vecinos y, como si fuera poco, son utilizados para bajar línea política kirchnerista. Basta de financiar tonterías.
P.D: no fueron 30.000. https://t.co/AIJs0JH7gq
— Ricardo López Murphy (@rlopezmurphy) February 20, 2023