BOLSONARO ATACÓ EL SISTEMA ELECTORAL LUEGO DE QUE LULA FORMALIZÓ SU CANDIDATURA

Elecciones en Brasil

BOLSONARO ATACÓ EL SISTEMA ELECTORAL LUEGO DE QUE LULA FORMALIZÓ SU CANDIDATURA

Por PPV

Las elecciones generales de Brasil están previstas para celebrarse el 2 de octubre del corriente año y en los sondeos que se vienen realizando ubican primero en intención de voto al ex presidente Luiz Inácio Lula Da Silva; acaso por ello, el actual presidente, Jair Bolsonaro, viene hace semanas atacando al sistema y a la justicia electoral.

La agresividad de Bolsonaro volvió a manifestarse luego de que el Partido de los Trabajadores (PT) de Brasil y sus aliados formalizaron la semana pasada la candidatura de Lula para las elecciones de octubre. Si bien es apenas una formalidad es un paso necesario para cumplir con la ley electoral y estar en condiciones de avanzar en su campaña pre electoral.

Este nuevo ataque de Bolsonaro se dio ante más de 70 embajadores y diplomáticos extranjeros y ante los que cuestionó las urnas electrónicas al compararlas con un «queso suizo» en relación a los puntos vulnerables que las hacen susceptibles de un ataque informático.

Además, Bolsonaro denunció la falta de «transparencia» del Tribunal Superior Electoral (TSE) y dijo que el presidente de ese foro, el juez Edson Fachin, apuesta a un triunfo de Lula.

Como consecuencia de ello, desde el frente político, diputados opositores activaron una acción ante el STF contra Bolsonaro «por subvertir y atacar el orden democrático, buscando un verdadero caos en el país y desestabilizar las instituciones públicas».

El recurso fue firmado por diputados del PT, Partido Democrático Trabalahista, Partido Verde, Red de Sustentabilidad, Partido Socialismo y Libertad y Partido Socialista Brasileño, entre otros.

Por ello, el Poder Judicial de Brasil repudió, a través del jefe del Supremo Tribunal Federal (STF) y de 40 procuradores de todo el país, al presidente Jair Bolsonaro y su desconfianza que genera el sistema electoral.

Todos coincidieron en una nota conjunta en la que pidieron que la Procuradoría General de la República (fiscalía) investigue al presidente por sus dichos de ayer ante diplomáticos de todo el mundo.

«La conducta del presidente de la República afronta la libertad democrática, con un claro propósito de desestabilizar y desacreditar el proceso y las instituciones electorales y, en este contexto, alberga, en tesis, la práctica de delitos electorales derivados del abuso de poder», señala la nota.

El texto reclama al fiscal general del Estado, Augusto Aras, que actúe «siguiendo su misión constitucional de protección de la democracia».

Por otra parte, y retomando la oficialización de Lula, el PT informó en un comunicado que la alianza «Brasil de la Esperanza», que también integran el Partido Comunista (PCdoB) y el Partido Verde (PV), «aprobó por unanimidad la fórmula Lula-Alckmin», con los 16 votos favorables de los integrantes de la conducción.

La coalición irá por otro mandato para Lula el 2 de octubre, frente a Bolsonaro y a Ciro Gomes, un exaliado del PT que lanzó su candidatura en busca de terciar en lo que parece un camino seguro hacia la polarización entre los dos nombres de mayor peso.

Gomes, del Partido Democrático Trabalhista (PDT), no tiene todavía compañero de fórmula ni el respaldo de otros partidos, pero aún así las encuestas lo ubican tercero y sus votos pueden ser valiosos en una eventual segunda vuelta.

Lula, proscripto en las elecciones de 2018, con 76 años, presidente entre 2003 y 2010 y preso casi 600 días por el lawfare que se desplegó en Brasil, prefirió dedicar sus presentaciones para acrecentar sus chances electorales.

Casi al mismo tiempo en que el PT hacía oficial su postulación, el ex sindicalista reunió a figuras del arte y la cultura en el Teatro del Parque, en Recife.

“Vine aquí para aprender. Cuando somos candidatos, convocamos a media docena de personas con mucha información para armar un programa sobre economía, seguridad, política agrícola, etcétera… Pero la teoría puesta en papel no siempre es factible en la práctica para los que gobiernan, cuando se necesita discutir la prioridad del dinero”, admitió Lula .