LOS MÁRTIRES DE LA ERA MACRI

LOS MÁRTIRES DE LA ERA MACRI

Por Ana Belén Marrello

Este 1° de Mayo encontró a la clase trabajadora argentina sumida en una profunda crisis laboral y económica producto de las políticas neoliberales del gobierno de la coalición Cambiemos. Despidos, ajuste, tarifazos, inflación, represión son algunas de las cuestiones que han caracterizado a la administración de Mauricio Macri. Sin embargo, las centrales obreras opositoras, junto a organizaciones sociales y políticas, han demostrado una vez más el poder de la lucha en las calles.

El paro nacional y la movilización convocados por el Frente Sindical para el Modelo Nacional -donde confluyen más de 80 sindicatos y 70 Regionales de la CGT-, la Corriente Federal de Trabajadores y las CTA fue contundente en todo el país. En Buenos Aires, el acto central fue en la Plaza de Mayo pero también hubo marchas en otras ciudades como Córdoba, Santa Fe, Rosario, Paraná, Bariloche y Resistencia. En tanto que en el Día Internacional de las, les y los Trabajadorxs, las centrales sindicales junto a organizaciones sociales realizaron más de 300 ollas populares entre el Monumento al Trabajo -frente al Ministerio de Agroindustria- y la Casa Rosada, para repudiar las políticas de Macri que hambrean al pueblo.

Hace 133 años condenaban en Estados Unidos a ocho obreros anarquistas que habían participado de las huelgas en Chicago en reclamo de la reducción de la jornada laboral a ocho horas (por entonces, en las industrias se trabajaba entre doce y 16 horas, sin franco). Es lo que se conoció como la Revuelta de Haymarket (por el barrio donde ocurrieron los acontecimientos). En medio de las protestas, que comenzaron el 1° de Mayo de 1886 y se extendieron por cuatro días, una persona desconocida lanzó una bomba a la policía que pretendía disuadir violentamente los reclamos. Esto desembocó en un juicio hacia ocho trabajadores. Cinco fueron condenados a muerte -uno se suicidó antes de ser ejecutado- y tres resultaron presos. Fueron denominados por el movimiento obrero los ‘Mártires de Chicago’ y, posteriormente, se eligió al primer día de mayo para conmemorar el Día Internacional de lxs Trabajadorxs, en memoria de George Engel (tipógrafo, 50 años), Adolph Fischer (periodista, 30 años), Samuel Fielden (obrero textil, 39 años), Albert Parsons (periodista, 39 años), Louis Lingg (carpintero, 22 años), Michael Schwab (tipógrafo, 33 años), August Spies (periodista, 31 años) y Oscar Neebe (vendedor, 36 años).
El hecho insólito es que ni en Estados Unidos ni en Canadá se conmemoran estos sucesos sino que celebran el Labor Day (Día del Trabajo) el primer lunes de septiembre.

“Reivindicamos el 1º de Mayo como un día de lucha, como un día de dignidad para la mujer que quiere trabajar y no lo puede hacer, para el hombre que es explotado”, expresó desde el Congreso Nacional, durante la sesión del 24 de abril, el diputado y secretario general de la CTA de los Trabajadores, Hugo Yasky. Y agregó: “Reivindicamos el 1º de Mayo como el compromiso de mi bloque y de muchos del sector del campo popular, por la construcción de un país en el que el trabajo, la distribución de la riqueza, el respeto a los maestros y maestras, a los jubilados, a los obreros, consista en sentir orgullo de trabajar con las manos, no de ser un parásito que vive de la especulación financiera, empobreciendo a un pueblo para llenarse los bolsillos y mandar la plata a los paraísos fiscales”.

En su alocución, el dirigente sindical también recordó a Felipe Vallese, Agustín Tosco, René Salamanca, Atilio López, a “los mártires de la dictadura” y al docente tucumano Isauro Arancibia “que fue también adalid de estas luchas y fue asesinado el mismo día del comienzo de la dictadura”, expresó Yasky.

Desde una Plaza de Mayo desbordada, con más de 200 mil personas sobre las Diagonales Norte y Sur y la Avenida de Mayo, Yasky agradeció tanto a quienes pudieron movilizarse “pese a los aprietes del gobierno” como a los que no tuvieron “un peso” en el bolsillo para poder hacerlo, y/o “tuvieron que ir a trabajar para no perder el presentismo”.

“Cuando en un país los chicos tienen que ir a comer al comedor del barrio; cuando en un país los jubilados tienen que comprar el pan de a 200 gramos; cuando en un país las maestras en vez de enseñar tienen que dar de comer; cuando en un país las Pymes que apoyan este paro no pueden producir; cuando en un país el parásito que especula financieramente gana más plata que el que pone a funcionar las máquinas de una fábrica; cuando en un país pasa eso, todos los que queremos vivir decentemente nos sentimos agraviados”, sentenció con sus manos sobre la bandera argentina en el atril, el líder docente, en un claro mensaje al gobierno.

“Si hay caos, si hay desorden, si las cosas están patas para arriba, no es culpa de ustedes, no es la culpa de nuestras mujeres, de nuestras jubiladas, de nuestras trabajadoras, de nuestras familias. Es la culpa de los que vinieron a bajar salarios, a apretar con la reforma laboral, de los que vinieron a ponerse de rodillas frente al Fondo, a pagarle a los que no tenían que pagar como lo están haciendo, a costa de nuestro sacrificio”, agregó.

También compartieron escenario y micrófono el titular de La Bancaria – CFT, Sergio Palazzo; Pablo Moyano, secretario adjunto del Sindicato de Choferes de Camiones – FSMN; Pablo Micheli, titular de la CTA Autónoma; Ricardo Peidró, referente del sindicato de Visitadores Médicos y CTA -que se escindió de la Autónoma de Micheli- , y Mariano Sánchez del Movimiento Independiente de Jubilados – CCC (Corriente Clasista y Combativa). Mientras que Omar Plaini, de Canillitas, leyó el documento consensuado y actualizado del Plenario de Regionales de la CGT que tuvo lugar el 11 de abril en Smata.

“Más de 50% de inflación, dos dígitos de desempleo, 14 mil Pymes que cerraron, 100 mil puestos de trabajo que se perdieron en el sector industrial”, enumeró Palazzo respecto a las políticas de Cambiemos “sujetas a los organismos internacionales”. Y agregó enérgicamente desde el escenario montado hacia Avenida de Mayo: “Vaya ejemplo que dan hoy de lo que es la entrega de la soberanía económica y nacional, cuando deciden que ya no se publique más cuántas reservas hay en el Banco Central. ¿Saben por qué? Porque se están afanado no un PBI, se están afanando un país entero, este gobierno y el Fondo Monetario Internacional como socios. Lo que están haciendo es producir la fuga de divisas más importante de la historia que tenga memoria el pueblo argentino y condicionando por cierto a cualquier gobierno que venga”.

El dirigente de los trabajadorxs bancarixs también se refirió a los dichos de la ministra de Seguridad Patricia Bullrich, quien previo al paro nacional dijo en conferencia de prensa, junto al ministro de Producción y Trabajo Dante Sica, que impedirían cualquier tipo de corte de rutas y habló de “mafias” que ya estaban actuando y “episodios cuasi terroristas”, enmarcados en el reclamo de los trabajadores, y que ese era el verdadero “riesgo país”. “Hablaron de cortes y no hablan de los cortes de luz, de gas, de agua que tienen millones de argentinos producto de un aumento salvaje en las tarifas de servicios públicos. Hablaron de actitudes mafiosas y se olvidan que existe una mafia enquistada, que viene lucrando hace 40 años con el Estado como contratista del Estado, y hoy ocupa la principal magistratura en la República Argentina. O se creen que no nos acordamos de la cloaca de Morón, de los 80 mil millones del Correo. Cuando hablen de mafia, miren hacia Balcarce 50 y no hacia los sindicatos”, arengó Palazzo.

En tanto, el líder de Camioneros Pablo Moyano hizo alusión a la conciliación obligatoria dictada por el gobierno, a través de la Secretaría de Trabajo, a nueve gremios, de las centrales sindicales que convocaron a la jornada de lucha, con el objetivo de retrotraer la legítima medida. “Que se metan la multa en el culo. Nosotros vamos a estar al lado de los trabajadores”, expresó sin pelos en la lengua, Moyano, y añadió: “No nos aprieta nadie, compañeros”.
También le respondió al ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, quien había manifestado en relación a la medida de fuerza que Moyano generaba “actos de violencia” para que la gente no fuera a trabajar. “No convence ni a su propio padre que salió a criticar las medidas económicas del gobierno. Qué puede saber este tipo de lo que sienten y pasan los trabajadores”.
Moyano, además,lanzó desde el escenario una dura crítica a la cúpula de la CGT. “Estos dirigentes que estamos acá y muchos de los que están abajo fuimos los que nos opusimos a la reforma laboral en el 2017, cuando la CGT la tenía prácticamente acordada con (el ex ministro de Trabajo, Jorge) Triaca. Fueron estos compañeros que movilizamos al Congreso de la Nación y con una marcha multitudinaria pudimos frenar esa reforma laboral. Y cada vez que el gobierno, a través del presidente o de un funcionario, nos dice que ratifican el modelo económico, nosotros ratificamos acá en la Plaza que vamos a seguir peleando contra este modelo económico de hambre, de entrega y de ajuste”.

“Este paro es por el 35% de pobres, por los jubilados, por los desocupados, y por tantos trabajadores que están perdiendo el poder adquisitivo por este modelo económico que solamente recibe las órdenes del Fondo Monetario”, concluyó Moyano y mencionó la jornada solidaria desde el Monumento al Trabajo hasta la Casa Rosada. “Vamos a darles un plato de comida a miles de chicos y mujeres. Estos funcionarios no saben nada, no entienden nada, no salen a la calle; viven otra realidad. Esta es la realidad de los trabajadores, con hambre, con despidos y con amenazas”, aseguró.