LITO BORELLO: “LOS MOVIMIENTOS SOCIALES TENEMOS QUE SER PARTE DEL DISEÑO DE LAS POLÍTICAS PÚBLICAS”
Por Ana Belén Marrello
A horas de la sexta marcha de la UTEP por Tierra, Techo y Trabajo, desde la Iglesia de San Cayetano en Liniers a Plaza de Mayo, Lito Borello, secretario de Derechos Humanos del gremio que agrupa a trabajadorxs de distintas ramas de la economía popular, ratificó los reclamos por el Salario Básico Universal, créditos para las cooperativas y fortalecimiento del sector a través del salario social complementario.
Al mismo tiempo planteó la necesidad de que los movimientos y organizaciones sociales y de la economía popular de todo el país formen parte del diseño de las políticas públicas tendientes a consolidar un proyecto de desarrollo independiente y soberano. Por otro lado, aseveró: “Pedimos trabajo y eso implica que no puede seguir solamente habiendo políticas de asistencia. La perpetuidad de las políticas de asistencia termina siendo asistencialismo”.
¿Cómo están organizándose para la marcha de San Cayetano?
La semana pasada hubo una reunión de Dirección Nacional, presenciada, la primera en ese carácter y era básicamente para definir eso, la realización del 7 de agosto, que en este caso sería la sexta, la primera fue en 2016, primer año del gobierno de Macri y que en este caso se resignificaba en función del debate que se dio en la reunión. Obviamente volvemos a pedir las consignas de Tierra, Techo y Trabajo, pero después ya del segundo año de pandemia hubo mucho debate de la necesidad de volver a salir a la calle, con todos los protocolos y cuidados del caso. Venía habiendo hace ya varios meses una demanda desde la militancia de, más allá de ser respetuosos de las formas sanitarias, encontrar el modo de poder poner en la calle lo que son los movimientos populares, para hacernos visibles y para también dar cuenta del nivel y de la gravedad de la situación que se está viviendo en los territorios.
Así que se decidió salir por la mañana, como siempre desde la Iglesia de San Cayetano en Liniers y caminar hasta la Plaza de Mayo. Ese también era un debate que en el último mes no había quedado del todo definido. Se habló en un principio de ir a Congreso, de ir a distintos lugares, todo también en función de la situación sanitaria, pero bueno, se terminó de definir la necesidad de ir a Plaza de Mayo, también dándole importancia al significado político que tiene terminar una marcha de San Cayetano en la Plaza de Mayo.
Y, por el otro lado, también que no sea solamente el único hecho que se haga, sino que sea una jornada nacional, y que las compañeras y compañeros de los distintos lugares, de las distintas provincias, de los territorios, que por alguna razón o por otra no puedan ser parte de la marcha de Liniers a Plaza de Mayo, hagan cosas en sintonía en cada uno de los lugares, por eso Jornada Nacional.
¿Cada provincia hará lo propio?
Cada provincia va a estar organizando en sus lugares. Seguramente habrá una marcha con las imágenes al frente de las columnas. En cada lugar se dio libertad para que en el mismo sentido del espíritu de la marcha en Buenos Aires se hicieran cosas similares para que también diera lugar a la participación de la militancia porque había mucha demanda en el último tiempo de poder salir a la calle y mostrarnos en la calle.
Uno de los reclamos es por el Salario Básico Universal, ¿están barajando algún número con las organizaciones, como piso de ingreso?
Se habla de números en alrededor de los 9000 pesos, en función de los valores que implica no quedar por debajo de la indigencia. La verdad es que estamos hablando de un número que va cambiando día a día, que la situación económica y social muestra cómo lamentablemente se siguen sumando al ejército de desocupación, o de quienes tienen que optar por la economía popular, por lo tanto, lo que se intenta es que haya un monto que permita tener un piso universal para que nadie quede por debajo de eso. Pero de todas maneras siempre seguimos insistiendo que lo que estamos pidiendo es trabajo, que lo que se pide es trabajo y eso implica que no puede seguir solamente habiendo políticas de asistencia, sino que tiene que haber políticas que permitan realmente el trabajo. Porque la perpetuidad de las políticas de asistencia, quiérase o no, se diga una cosa o no, termina siendo asistencialismo.
También piden créditos para las cooperativas y el fortalecimiento de lxs trabajadorxs de la Economía Popular a través del salario social complementario.
Justamente va en el sentido de poder generar trabajo. Los créditos y todas las ventajas comparativas que tiene que haber para que de verdad se pueda planificar una economía popular que no esté mirada como la economía de los pobres, la economía de los que no tienen trabajo, sino que en la planificación de la economía a nivel nacional se entienda que ya no hay más posibilidad en el marco del capitalismo de pleno empleo como cuando lo conocíamos hace cuatro o cinco décadas atrás. Por lo tanto, esto llegó para quedarse y esto implica que en la planificación del país tiene que haber, en producción, en economía, en trabajo, este concepto tiene que estar desarrollado ahí. No podemos seguir teniendo el centro de gravedad en el Ministerio de Desarrollo Social si de verdad queremos desarrollar una economía popular que sea parte del entramado y de un proyecto de desarrollo independiente, soberano, para nuestro país.
¿Estás de acuerdo con el debate en torno a que la reducción de la jornada laboral posibilitaría la creación de más fuentes de trabajo?
Lo que creo, más allá de que por supuesto puede ser una de las estrategias, que no alcanza una sola estrategia. Que hay que tener un menú de estrategias y para eso los movimientos populares pedimos que no se nos vea solamente como beneficiarios. Que entiendan que este sujeto emergente, que Francisco nos dice ‘ustedes son sujetos de transformación’, ‘ustedes han inventado el trabajo’, ‘son poetas sociales’, tenemos que ser parte del diseño de las políticas públicas. Y que no solamente nos inviten cuando tienen que decir que nos van a dar alguna política asistencial de las tantas que ya hay. Todo ayuda y bienvenido sea, por supuesto. Nosotros peleamos para que se vaya el macrismo del país, se fue de la Casa Rosada pero no se fue del poder. Está claro que este gobierno tiene a 180° su dirección respecto de lo que era el macrismo en la Argentina. Pero también está claro que necesitamos una mirada mucho más profunda, cambios mucho más estructurales, que nos den la garantía de que no sigamos teniendo que pensar solamente en kilos de comida y en planes sino que de verdad nos puedan permitir a los movimientos sociales, a este sujeto emergente, a este sujeto que desde hace dos años estamos en la primera línea de combate contra la pandemia, poder ser parte del diseño de las políticas públicas, de la práctica y del ejercicio de esas políticas. Que no nos avisen cuando ya están. Por lo tanto, es bárbaro una o dos medidas, pero no es una o dos medidas, es una planificación más global que tiene que ver distintas cosas y por eso planteamos que tenemos que ser parte.
¿Están teniendo el apoyo del arco político y sindical para participar este 7 de agosto?
Siempre los movimientos populares hemos sido muy amplios a la hora de invitar a que nos acompañen en nuestras medidas, como así también nosotros participar de las que el movimiento obrero ha ido llevando adelante. Por supuesto que sí, que están las invitaciones. Para nosotros sería un honor marchar juntos en esta marcha que se ha convertido en un ícono, ya de seis años. Estamos invitando a todos los sectores de manera plural y democrática porque a la vez cada vez tenemos más claro que los movimientos populares somos esencialmente trabajadores y hemos conformado un sindicato de nuevo tipo como es la UTEP. Y cuando los trabajadores no son parte del proyecto nacional, no son columna y cabeza de los procesos de transformación es muy difícil que el destino de lo encaminado termine en buen puerto, en el sentido de los intereses nacionales y populares. Así que seguramente sí habrá distintos sectores del movimiento sindical que marcharemos juntos y codo a codo hasta el destino de Plaza de Mayo.
¿Coincidís con el rumbo que está tomando el gobierno, en este contexto de pandemia, o considerás hay que profundizar en algunas medidas como ya mencionaste?
En cuanto a la pandemia, nosotros creemos que el gobierno, por supuesto, ha sido acertado con las decisiones de los cuidados que ha tenido que tener. Cuando decimos profundizar, lo que estamos diciendo es que primero tiene que tener en cuenta a los últimos, como lo dijo el Presidente. Y para eso, es inevitable que para ayudar a los últimos, los primeros sean tocados y se quejen y por lo tanto tenga que haber medidas mucho más profundas hacia los sectores dominantes. En estos dos años, inclusive de pandemia, se han enriquecido, se han llenado los bolsillos de dinero. A nivel mundial, los números duros indican que ese puñado de poderosos, adoradores del dios dinero, que no les interesa más que un mundo para pocos, se han llenado los bolsillos de dinero. Es necesario que haya cambios estructurales, y eso implica, defender los intereses nacionales y populares, y tocar otros intereses. Bueno, hay que estar dispuesto a tocar esos intereses. Para eso, nosotros estamos en la primera línea de combate. Estamos dispuestos a hacer todo lo que sea necesario para defender a un gobierno que esté dispuesto a ir a fondo pero para defender los intereses nacionales y populares. Para eso peleamos cuatro años contra el macrismo. Para eso peleamos en la primera línea, para que se fuera en cuatro años. Para eso seguimos diciendo que todavía falta profundizar algunas medidas.
¿Cómo estás viendo los preparativos para las PASO de cara a las elecciones legislativas?
Creo que las elecciones legislativas, como está pasando en toda la región, hay una política que no está a la altura de las circunstancias, hay una política institucional que no termina de estar a la altura de los desafíos que los pueden ir reivindicando, y por eso cada vez más hay un agotamiento, un descrédito hacia esa política. Nosotros creemos que debería haber una mayor generosidad de la clase política para dar lugar a los emergentes de los trabajadores y de los movimientos populares. Lamentablemente, el último cierre de lista no ha indicado eso. Pareciera ser que sigue habiendo quienes se creen dueños de la política y quienes pareciera que tendríamos que tener solamente la tarea de la asistencia. Bueno, esto no pasa solamente en Argentina. Por eso vemos en Colombia, en cada uno de los países, en Chile, cómo hay un pueblo que frente a la necesidad no se queda quieto, se organiza, lucha y sigue para adelante. Creo que más que nunca es necesario y urgente la construcción de otro mundo posible porque, como lo dijo Francisco, junto a Evo Morales, en el Segundo Encuentro de Movimientos Populares, este sistema no da más y es necesario construir otro mundo posible. En eso andamos los movimientos, no solamente pensando en una lista sino pensando construir otro mundo posible para que los nuestros y las nuestras tengan de verdad un futuro digno.
Las organizaciones sociales de la UTEP concentrarán el sábado 7 a las 7:00 en la Iglesia de San Cayetano en Liniers y marcharán desde allí hasta Plaza de Mayo. El acto central está estimado para las 15:00 y lxs oradorxs serán Esteban “Gringo” Castro, secretario general de la UTEP; Dina Sanchez, secretaria general adjunta de la UTEP y vocera del Frente Popular Darío Santillán (FPDS); Norma Morales, secretaria general adjunta de la UTEP y referenta de Somos Barrios de Pie; Fredy Mariño, secretario de Organización de la UTEP y referente de la Corriente Clasista y Combativa (CCC), y Gildo Onorato, secretario gremial de la UTEP y presidente de la Federación de Cooperativas de Trabajo del Movimiento Evita.
Desde las 10:00 habrá una feria popular en las inmediaciones de la Casa de Gobierno y se dispondrán postas sanitarias a lo largo del trayecto para las personas que necesiten hidratarse y/o descansar o recuperarse.
Producto de la larga lucha y organización de los movimientos sociales y de la decisión del gobierno de reconocer a un sector que viene creciendo, esta semana salió la resolución del Ministerio de Trabajo de la Nación que otorga la personería social a la Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular. “Esta personería es un gran paso en el reconocimiento de nuestro sindicato y del otorgamiento de la personería gremial”, celebró la UTEP en un comunicado.