LN+ lo hizo otra vez
LA VIOLENCIA Y EL ODIO COMO ÚNICA NARRATIVA
Por PPV
Anoche, durante el programa de Viviana Canosa en el canal LN+, la conductora junto a la periodista invitada Laura Di Marco emitieron opiniones y comentarios que conformaron un discurso de odio contra la vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, y completaron un escenario de violencia digital dirigido a Florencia Kirchner, la hija de CFK.
Ambas hicieron comentarios y referencias a cuestiones personales, basándose en imágenes que la joven posteó en su Instagram, tratándola como una mujer que padece una enfermedad y especulando sobre los motivos. Todos los argumentos fueron alrededor de la figura de Cristina y su rol como madre.
Di Marco afirmo: «La hija de Cristina tiene una anorexia nerviosa galopante y quienes estudian la enfermedad de la anorexia saben que esa enfermedad remite a falta de madre, falta de nutrición materna».
«¿Quién es Cristina? Es una mujer muy resentida, que no curó su resentimiento. La infancia te marca mucho. Ella es hija de madre soltera. La mamá tenía una bipolaridad. Su papá no la reconoce al nacer», llegó a decir.
En twitter, desde que comenzaron a nombrarla, Florencia se convirtió en tendencia y se mantuvo entre las mismas durante más de 15 horas. A lo largo de todas esas horas miles de tuits repitieron en loop cada uno de los agravios que virtieron Canosa y Di Marco.
Esto generó inmediatamente una cataratas de repudios como por ejemplo Florencia Saintout, Presidenta del Instituto Cultural de la Provincia de Buenos Aires hasta La Cámpora que emitió un duro comunicado al respecto.
Discurso de odio. Mentira. Violencia. Humillación. Hostigamiento. Deshumanización. Brutalidad. Perversidad. Crueldad.
¿De verdad? ¿Hasta cuándo? ¿Para qué? pic.twitter.com/kFicnpIULP
— La Cámpora (@la_campora) April 8, 2023
«Hace veinte años que Cristina y su familia es violentada de manera pública y sistemática por las estructuras más poderosas del país. La barbarie de Julio Saguier, dueño de La Nación y amigo de fiscales y jueces ¿tiene un límite?», expresó.
Y manifestó: «No van a parar hasta que la bala salga. Esto es fusilamiento mediático. Alguien debe hacerse cargo».
Por su parte, la Defensora del Público de Servicios de Comunicación Audiovisual informó a través de su cuenta de twitter: «Nuestros equipos técnicos están trabajando a partir de reclamos de las audiencias referidos a las afirmaciones emitidas en un medio de comunicación sobre la vicepresidenta y la salud de su hija. En breve nos expediremos sobre el tema».
Cabe recordar que la Defensoría no tiene poder sancionatorio; sin embargo, el Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM) sí dispone de esa facultad.
El vicepresidente del Enacom, Gustavo López, aseguró desde Twitter y «a título personal» quería hacer público su «repudio» a lo que definió como «declaraciones estigmatizadoras, falsas y discriminatorias de Viviana Canosa y Laura Di Marco hacia Florencia Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner», en referencia al programa de LN+.
Hace poco, el Gobierno Nacional decidió modificar la resolución sobre pauta oficial que regía desde el macrismo.
Mediante esa modificación se informó que para acceder a la pauta del Estado los medios deberán cumplir con diversos requisitos, entre los que destacan la expresa mención a evitar la difusión de discursos de odio.
La resolución 9090/2023 manifiesta que debe cumplirse con los artículos 70 y 71 de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual N° 26.522.
El 70 se refiere a «evitar contenidos que promuevan o inciten tratos discriminatorios basados en la raza, el color, el sexo, la orientación sexual, el idioma, la religión, las opiniones políticas, el origen nacional o social, la posición económica, el nacimiento, el aspecto físico, la presencia de discapacidades o que menoscaben la dignidad humana o induzcan a comportamientos perjudiciales para el ambiente o para la salud de las personas y la integridad de los niños, niñas o adolescentes».
Desde Revista PPV – Periodismo Por Venir manifestamos nuestro repudio y exigimos que se cumpla la ley.
