BOCA: LA ÚLTIMA RESISTENCIA EN PIE

BOCA: LA ÚLTIMA RESISTENCIA EN PIE

Por PPV

Pasaron las elecciones nacionales y ya tenemos nuevo Presidente electo que asumirá el próximo 10 de diciembre.  Javier Milei se convertirá en quien lleve adelante los destinos de este país con muchos cambios drásticos en todos los sectores, y el fútbol no es la excepción.

Tal como lo anticipó antes de las elecciones en el programa de Alejandro Fantino, el nuevo presidente es admirador del modelo inglés para la gestión de los clubes de fútbol.  Es decir, prefiere que los clubes sean propiedad de grupos económicos y no sociedades sin fines de lucro.

Sin bien la mayor parte del arco futbolístico se mostró en contra de este cambio de administración (las llamadas Sociedades Anónimas Deportivas -SAD-), es una pelea que aún hay que dar.  Flavio Azzaro anticipó en su canal de YouTube hace unos meses que Macri le habría pedido a Milei privatizar YPF para que así los qataríes desembarquen en el futbol local.  En esa sintonía, el primer anuncio que hizo Milei como Presidente electo fue el de privatizar varias empresas estatales, entre ellas la petrolera.

Hace 4 años parecía que ese intento de privatizar el fútbol quedaba enterrado para siempre, con Juan Román Riquelme desplazando al macrismo-angelicismo de Boca, pero este año el ex presidente de Boca encontró en la crisis dirigencial y futbolística de Independiente un nuevo hueco para retomar su viejo anhelo.  Aprovechando el desastre que hizo Moyano en la conducción del club de Avellaneda, impusieron a un candidato títere como Doman, quien ante la primera crisis renunció dejándole el lugar a Néstor Grindetti (por entonces intendente en plena función del Municipio de Lanús y con aspiraciones a Gobernador Bonaerense).  Hoy Independiente es un bastión importante del macrismo que futbolísticamente levantó con un entrenador fiel a Macri como lo es Carlos Tévez.

Ante un escenario favorable a nivel nacional y con 4 años por delante para intentar la privatización de los clubes, con una función clave en la FIFA como la Fundación que preside, Mauricio Macri apuesta fuerte a retornar a la política de Boca como vicepresidente de Andrés Ibarra.  Del otro lado estará Juan Román Riquelme, quien siempre lo enfrentó y tiene como respaldo 6 títulos en 4 años de gestión, los trabajos del campo de juego de la Bombonera (ya no se inunda más), Boca Predio, la puesta en valor de otros deportes del club, los grandes logros deportivos de las juveniles (Campeón de América y del Mundo) y el fútbol femenino (Las chicas jugaron la final del campeonato en una Bombonera repleta).  Queda debilitado por el subcampeonato de la Libertadores 2023 y la no clasificación a la edición de 2024.  La obtención de la Séptima hubiera sido el empujón final para definir la elección del próximo 3 de diciembre.

Como es costumbre, durante todo este año (y en los últimos meses en particular) hubo muchas operaciones en contra del actual vicepresidente del club de la Rivera.  Con la fiscal Celsa Ramírez como aliada, las clausuras a la Bombonera por cuestiones mínimas no se hicieron esperar: en la fecha 1 del torneo la Bombonera fue clausurada por supuestas deficiencias edilicias en la bandeja 3.  El pasado 16 de noviembre la clausura volvió a caer sobre la Bombonera por un supuesto exceso en la capacidad de espectadores durante el partido que la Selección Argentina jugó por Eliminatorias contra Uruguay, lo cual quedó demostrado que era mentira por el documento policial que determinó que hubo menos hinchas que la capacidad permitida.  Por eso no les quedó más remedio que tirar atrás la clausura el mismo día que la impusieron.

El jueves pasado ante un pedido de (en principio) 8 socios de religión judía, el Poder Judicial de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires instó al club a cambiar la fecha de las elecciones.  El cambio se basa en que la primer fecha fijada (sábado 2 de diciembre) coincide con el Shabat, jornada sagrada para la religión judía, y por lo tanto muchos socios practicantes no podrían emitir el sufragio.  El cambio de fecha es irregular ya que la solicitud no fue realizada por 8 personas, sino por una y que 6 de esas personas firmantes se enteraron por la televisión que su nombre estaba incluido en la solicitud.  Ante esto, el club decidió no apelar la medida y mover la fecha de las elecciones al domingo 3 de diciembre, pero sacó un comunicado contundente explicando la situación.

A su vez, la oposición puso en duda la condición de socios activos de 12.300 personas que están habilitadas para votar en los próximos comicios, lo que generó que el martes 28/11 la jueza Alejandra Débora Abrevaya suspendiera las elecciones con un fallo polémico lleno de inconsistencias.  Por ejemplo en el fallo detalla que varios de los socios fueron pasados a activos en el período agosto-noviembre 2021 en días sábados o domingo, donde no hay actividad administrativa.  Pero la realidad es que los días citados en el fallo corresponden todos a días jueves.

Así mismo, el fallo causa sorpresa ya que en 2015 y 2019 cuando la actual dirigencia era oposición hubo una presentación similar por la suma de casi 52.000 socios activos de forma irregular que no fue tomada en cuenta por la IGJ (En 2012 los socios activos era 63.650 y en 2019 se incrementaron a 115.123.  No sólo eso, sino que actualmente la cantidad de socios activos es de 114.665, es decir que luego de 4 años de gestión Ameal-Riquelme hubo un descenso de socios activos.

Si bien parece menor, un triunfo de Juan Román Riquelme en las próximas elecciones de Boca sería un espaldarazo a la resistencia contra las SAD.  No sólo porque la posición del último 10 sobre el club es firme, sino porque sería evitar que el empresariado desembarque en el club más grande de Argentina, de América y del Mundo y vea debilitada su posibilidad de privatizar los clubes.

Por eso, en estos tiempos de turbulencia no queda más que ser bosteros y bosteras para bancar la resistencia final: El Club Atlético Boca Juniors será el punto de partida para el resurgimiento de la clase popular.  ¡AGUANTE BOCA!