El gobierno de Larreta aduce un error
HACE UNA SEMANA 30 FAMILIAS SIGUEN EN LA CALLE Y SIN RESPUESTAS
Por PPV
Casi 30 familias del Barrio porteño Padre Múgica -en Retiro- duermen en la calle y siguen sin recibir respuesta alguna desde hace una semana por parte del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, quien adujo que la demolición de los hogares se debió a «un error».
El hecho, que incluso incendió por completo uno de los inmuebles, ocurrió bajo el plan de urbanización que quiere implementar en el barrio el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
«Es muy doloroso perder todas tus cosas: los recuerdos de tus hijos, lo vivido ahí, las cosas que me he comprado con tanto sacrificio. Y en un error del gobierno tiraron todo. No estamos pidiendo algo que no nos corresponde, estamos pidiendo nuestras casas», dijo una vecina del barrio cuya casa fue afectada por el fuego.
«Estamos acá, en el bajo de la autopista todos juntos, en la misma situación, sin respuesta. Sin seguridad de que estén bien nuestras casas. No nos dieron respuesta de cuándo podríamos volver», contó Gladis Zunilda Espinoza Sanabria, que vivía en una de las viviendas afectadas con sus dos hijos – de 15 y 9 años- y su madre, de 50.
«Desde que pasó esto no comparto más con mis hijos. Los tengo en casas ajenas porque tengo miedo acá: el barrio no es seguro y yo estoy viviendo en la calle», dijo María Isabel Báez, que quiere mostrarse «fuerte» frente a ellos, pero siente que ya no puede porque está «muy triste» y cansada producto de una discapacidad que tiene.
La planificación porteña
La empresa Villarex SA, contratista del Gobierno porteño para los trabajos de demolición de viviendas, hace una semana tiró abajo una losa mientras realizaba trabajos como parte del Plan de Urbanización, pero terminó provocando el derrumbe de otra losa lindera, lo que afectó las casas de unas 30 familias.
Horas más tarde se generó un incendio, del que se desconoce el origen, y que terminó de afectar por completo una de las viviendas.
En un primer momento, la única propuesta concreta que acercó el gobierno porteño fue la de ubicarlos en distintos paradores porteños, pero por miedo a sufrir robos en sus casas -algunas familias tienen mascotas que no se aceptan en los refugios-, la mayoría se negó.
Luego, el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta brindó un baño químico y que al menos 10 familias duerman en una oficina de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses).
Como consecuencia de este abandono por parte del gobierno porteño, algunos vecinos, acompañados por el Centro de Acceso a la Justicia (CAJ) del barrio, legisladores y otros organismos, se acercaron el viernes pasado a la Fiscalía Penal, Contravencional y de Faltas N°12 para radicar una denuncia por lo ocurrido.
Desde que ocurrió el siniestro, la Subsecretaría de Emergencia porteña no permite que esas personas retornen a sus hogares hasta tanto estén garantizadas las condiciones edilicias y ordenó «demoler de manera total» la losa sobre el segundo piso que provocó el derrumbe del resto el miércoles pasado.
Además, agregó que «a los fines de evitar riesgo a las personas y los bienes, se indica que ninguna de las casas vecinas sea habitada hasta que no se realice el trabajo indicado».
«Estamos a la espera de cuál va a ser el operativo que disponga hoy la UPE (Unidad de Proyecto Especiales, a cargo de Tomás Galmarini). Hasta el momento no se presentó ni con los vecinos ni con nosotros», expresó ayer la legisladora porteña por el Frente de Todos, María Bielli, quien se encontraba junto a los diputados Lucía Cámpora y Javier Andrade en la ronda.
Mientras se prevén lluvias para los próximos días, , los vecinos advierten que viven «con miedo» y en una situación «de inseguridad» y aguardan alguna solución.