GABINETE EN CRISIS, RECESIÓN, DECRETAZOS Y REPRESIÓN

Seis meses de Milei

GABINETE EN CRISIS, RECESIÓN, DECRETAZOS Y REPRESIÓN

Por PPV

Recesión económica como fórmula para tratar de controlar la inflación, un severo ajuste del gasto público con la represión como forma de disciplinar y acallar la protesta social marcan los primeros seis meses del Gobierno del presidente de Argentina, Javier Milei.

Milei asumió el cargo el 10 de diciembre pasado y desde esa fecha está empecinado en dar lo que denomina una «batalla cultural» contra el populismo para que el país sea de aquí a los próximos 30 o 40 años una «potencia mundial»; sin embargo, se muestra como una continuidad del macrismo en muchos planos mientras que en otros es una reproducción de recetas económicas que ya fracasaron en el país.

Acaso una de las muestras que se viene percibiendo respecto de la crisis del gobierno se puede encontrar en la portada del Clarín del 1ro de junio, que tuvo que publicar el bochorno del gobierno por esconder la comida de los comedores y contratos escandalosos que marcan el grado de corrupción que marcó la salida de varios funcionarios.

Cabe recordar que en estos seis meses ya son más de 50 los funcionarios que han renunciado a su cargo y el ministerio de Capital Humano acumula 20 de ese total: lo que representa el 33%, es decir, 1 de cada 3 funcionarios son de la cartera que conduce Sandra Pettovello.

Por su parte, el diario «La Nación» explicó este domingo que a seis meses de su asunción, Milei «se acerca a un punto de inflexión. La etapa que se iniciará mañana (por hoy) será crucial para el Presidente, no solo para medir la viabilidad de su plan, sino su capacidad para blindar la gobernabilidad y tomar las riendas de la gestión estatal».

El diario fundado por Mitre consideró que en ese plano, Milei «logró su objetivo, con un saldo alentador para él: retuvo altos niveles de apoyo social, pese a que implementó un brutal ajuste».
Sin embargo, resaltó: «No obstante, Milei sufrió contratiempos, debido a la presión por los recortes, su mala praxis en la gestión y su impericia para sellar acuerdos».

Las consecuencias de esos recortes y mala praxis, el gobierno trató de imponer a palo, bala y gases. Y si esto no alcanzaba, se abría la vía judicial.

Dos muestras de esto fue la brutal represión que desplegó sobre la 9 de julio cuando el 10 de abril se reprimió el pedido de asistencia a los comedores que ya venían sosteniendo el reclamo de comida. Milei lo festejó.

La pobreza en Argentina alcanzó en el primer trimestre del año al 55 por ciento de la población, mientras que la indigencia fue del 17,5 por ciento, según un informe de la Iglesia Católica local.

Esta situación social ha generado huelgas y movilizaciones impulsadas por sindicatos opositores y distintas organizaciones populares. Milei festejó la represión de las personas detrás de esos números.

En oportunidad de tratarse en el Congreso la Ley Ómnibus, tanto el miércoles como el jueves, las fuerzas de seguridad avanzaron sobre los manifestantes con camiones hidrantes, balas de goma y gas pimienta y más de 20 trabajadores de prensa resultaron heridos.

En cuanto a la economía, en abril pasado se registró una inflación del 8,8 por ciento, el primer dato mensual de un dígito desde octubre pasado, con lo que acumuló 289,4 por ciento interanual, según informó el 14 de mayo pasado el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).

La actividad económica a su vez cayó en marzo anterior un 8,4 por ciento interanual y acumuló una contracción del 5,3 por ciento en el primer trimestre, según los datos del INDEC.

Milei ha dicho que las medidas adoptadas sirvieron para evitar una hiperinflación, además de que la economía muestra señales de mejoría, en un claro mensaje que no se corresponde con la realidad.

«Si no tomábamos medidas urgentes, la inflación podía llegar a niveles del 15.000 por ciento anual. En diciembre la inflación mayorista, que suele adelantarse a la inflación minorista, fue del 54 por ciento mensual», señaló recientemente Milei sin dar sustento técnico alguno.

Por si fuera poco, mediante el DNU 70/2023, se generan situaciones como la que se intenta llevar adelante con la derogación de la Ley N°27.114, así como la modificación y derogación de artículos de la Ley 25.564 vinculada a la yerba mate.

Finalmente, y en este contexto, mientras el gobierno asegura que “los sueldos están creciendo al doble de la inflación”, este miércoles se tratará la ley bases.

En materia de números, en el senado se indica que hay 33, que pertenecen a la oposición y que ya plantearon su rechazo al tratamiento, aunque podría encontrarse en la figura del radical Martín Lousteau para poder sumar otras voluntades: los senadores del bloque federal, Alejandra Vigo, Edgardo Kueider, Camau Espíndola, Mónica Silva y Luciana Crexell, que apoyan buena parte de las modificaciones que planteó el presidente del radicalismo.

De esta manera aparece la posibilidad de dar por tierra con el proyecto de ley que lleva en sus entrañas en Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI) y que constituye el regalo de nuestra soberanía.