EMPRESARIADO NACIONAL: RECONSTRUCCIÓN DE LA ARGENTINA PRODUCTIVA

Entrevista a Leo Bilanski, presidente de ENAC.
EMPRESARIADO NACIONAL:
RECONSTRUCCIÓN DE LA ARGENTINA PRODUCTIVA
Por María Quintero
Ph Daniel Bello
Este miércoles, las Pymes y Empresarios Nacionales se reunirán en un encuentro organizado por ENAC y APYME en el Paseo La Plaza a las 16hs para presentar “Aportes del empresariado nacional para la reconstrucción de la Argentina Productiva”. Más de 500 empresarios nacionales se juntarán para debatir. El encuentro contará con la presencia del candidato a Presidente Alberto Fernández.
En este marco, PPV entrevistó a Leo Bilanski, presidente de Empresarios Nacionales para el Desarrollo Argentino (ENAC) para charlar sobre la situación que atraviesan las Pymes, el rol de la Pymes frente a un nuevo gobierno, los medios de comunicación, la fórmula Fernández- Fernández y el proceso de unidad que están forjando el empresariado nacional.
¿Cuál es la situación actual por la que atraviesan las Pymes?
Las PYMES están en la periferia de las decisiones políticas, eso es un problema estructural porque no se prioriza a un entramado de unidades productivas que emplean 7 de cada 10 puestos de trabajo registrado. Además, hay un esquema neoliberal, por llamarlo de alguna manera, que ideológicamente no cree que seamos un sujeto central en el desarrollo de la economía.
Entonces, a lo largo de estos 3 años, se fueron tomado una serie de medidas deliberadas que, finalmente, terminaron castigando a la pequeña y media empresa: Primero, el 21 de diciembre de 2015, fue la apertura indiscriminada de importaciones. Después, en enero de 2016, el aumento brutal de tarifas, a usuarios, a industrias y comercios. Más tarde, la dolarización de los insumos difundidos, combustibles; luego, el aumento de la tasa de interés de referencia, producto de los dólares que se estaban venciendo de las Lebacs.
Nosotros, en 2017, le reclamábamos a Federico Sturzenegger un acuerdo, cuando la tasa de referencia estaba al 28%. Hoy está al 70%, o sea, hoy estamos prácticamente en una dictadura financiera, donde el que tiene espalda para autofinanciarse, sobrevive y el que no, se funde.
Toda esa batería de medidas, sumado a, por supuesto, algo que es central, como lo es la reducción del poder adquisitivo de lxs trabajadorxs en términos reales, llevó a que desaparezcan más de 15 mil Empresas Pymes. El año pasado, nosotros denunciamos que había un cierre de 25 Pymes por día, hoy pasamos a 50 por día. Y ahora, el contagio atraviesa a todas las empresas, micro, pequeñas, medianas y grandes. Las automotrices están suspendiendo y despidiendo trabajadorxs industriales, que son los de mayor calificación, de mayor ingreso promedio y registrados. O sea, hay 130 mil puestos de trabajo industriales menos respecto de 2015, en un sector que es estratégico y desde donde deberíamos mandar productos con valor al mundo y traer divisas para pagar la deuda externa, seguir exportando.
Así que el plan es malo, las medidas que tomaron fueron peores y dañaron un tejido productivo social que es vital, que es el entramado Pyme.
En la presentación de su libro, Cristina habló de un nuevo Contrato Social, ¿cómo debería ser el rol de las Pymes en ese Contrato Social?
La construcción de un contrato social en el cual las PYMES tengamos un lugar central. Nosotros entendemos que somos los empresarios quienes vivimos del mercado interno, somos las empresas que dependen de la vitalidad de la economía argentina. Si se hunde la Argentina, a nosotros nos va mal; si a la Argentina le va bien, a nosotros nos va bien también. A nosotros, los empresarios, y a nuestros trabajadores.
Es como una comunión, hay un vaso comunicante, un equilibrio, que es el Estado quien debe garantizar que se vaya sosteniendo. Lamentablemente, desde el último pacto social que se hizo en 1974 con el ministro José Ber Gerbald, entre la Confederación General Económica (CGE), la CGT y el Estado, no hubo una voz que represente al empresariado nacional. Después de la CGE, que se la intervino en 1976, no se pudo recuperar el protagonismo.
Entonces, a lo largo de los años, las Pymes se fueron estructurando bajo las entidades que quedaron. Y hoy, las entidades que dominan la política de las Pymes son AEA, el G6, el coloquio IDEA, el Foro de Convergencia, el Consejo Interamericano de la Producción y el Comercio; todas entidades que, en general, representan a grandes corporaciones nacionales o incluso a muchas que son extranjeras.
Así, la Pymes terminaron bajo un esquema de dominación. Y siempre, en los años ’80, en los ’90 y también en el kirchnerismo, en la periferia de las decisiones políticas. Y hago la salvedad de que el proceso de crecimiento económico con Néstor y Cristina fue el más largo desde el retorno de la democracia porque hubo creación de empresas, sustitución de importaciones y crecimiento de la rentabilidad empresarial.
Creo que el kirchnerismo es la consigna sin el sujeto, porque en vez de finalizar ese periodo con una central empresaria que nos contenga a todos, ese espacio no existió.
Después el rol social del empresario es: sí, hay que cuidarlo al empresario, pero también el empresario tiene que cuidar a la sociedad en la cual está inserto. No más trabajadores informales, en negro, no más vender en negro, somos un sujeto aportante neto de impuesto, eso es parte de la función social que tiene la generación de riqueza.
Por supuesto que hay cosas que el Estado da, que debe proveer al sector y no las provee, y hay que discutirlas, pero el esquema que nosotros buscamos es el de una sociedad organizada, donde cada uno tenga un rol claro y definido. Debemos entender eso, porque muchos empresarios creen que es solo ganar dinero y desaparecer, como si fuera una carrera de velocidad, y el proyecto de país que nosotros estamos buscando, que es de desarrollo, en realidad es una maratón, que tiene que ver con ganar dinero, pero también con invertir, con formar a nuestrxs trabajadorxs, con formarnos como empresarios: el mundo cambió.
¿Cuál es ese cambio?
Hoy el comerciante de barrio está compitiendo con el comerciante de China, que vende mil productos por mejor o menor precio por teléfono. Entonces, nuestra cultura empresarial tiene que, por un lado, sostener este entramado social que te decía y, por otro, tiene que estar a la altura de las circunstancias.
La uberización de la economía dice que hay que avanzar y tratar de maximizar tu rentabilidad a como dé lugar, y no, no es ético “a como dé lugar”, porque finalmente, quién paga el costo de la precarización laboral, el costo de no pagar impuestos. Toda la sociedad porque después tenemos menos hospitales, el jubilado no tiene la asistencia que le corresponde en salud. Entonces, ahí también el empresario tiene que hacer autocrítica.
El acuerdo social es con el Empresario Pyme adentro, con los empresarios nacionales al frente y con un Estado presente. Es por ahí por donde nosotros estamos empezando a abrir una discusión.
¿Cómo recibiste la Formula Fernández- Fernández?
Desde lo ejecutivo, desde lo electoral, Fernández – Fernández es una formula mucho más competitiva, creo que cada unx viene a cumplir dos roles distintos. Nosotros, en una encuesta que realizamos entre 540 empresarios, medimos la capacidad de los dirigentes de crear inversión y trabajo y crecimiento económico; y Cristina es la que mejor mide, con el 67% de valoración respecto a los empresarios.
Nosotros decimos que tiene curriculum que garantiza que la Argentina se ponga de pie; ahora, tiene que ser con todos, a la máxima capacidad de personas que podamos integrar, creo que ahí, Alberto Fernández tiene una función.
Ahora, claramente, la Argentina que viene será de reconstrucción, de sanar los daños que tuvo la sociedad, y eso va a llevar un tiempo. Va a ser un proceso de recomposición social, pero, como te decía antes, tiene que ir en mayor o menor medida encausado hacia la senda del desarrollo, más allá de que nos tomemos el tiempo para sanar las heridas y reconstruir el tejido productivo y social de la Argentina. La senda del desarrollo es creando más empresas pymes nacionales, fortaleciendo el poder adquisitivo de lxs trabajadorxs, transformando la matriz productiva, incorporando al campo como sujeto comprometido con el proyecto colectivo y no solo con el campo, es poniendo en el centro de la escena a la ciencia y la tecnología, alineando el sistema de producción de conocimiento con el de producción y tecnología, con el de producción de bienes y servicios.
Por supuesto, con una sociedad en la cual se garantice la soberanía alimentaria, que es un tema que es central también para las Pymes. No podemos permitir que ésta avanzada que hubo en los últimos 30-40 años en la Argentina, donde las grandes corporaciones se van juntando y son 5 o 6 marcas las que hacen los alimentos que nosotros comemos, a precio caro, y de mala calidad. Entonces, si hay algo que es central en la Argentina es la alimentación y la salud, tenemos que exigir que sea de alta calidad en ambos ejes, al costo que sea para el Estado, pero tiene que ser accesible para la sociedad.
No podemos ser productores de petróleo y de alimentos y no tener el mejor alimento en la mesa de los argentinos, en abundancia, algo que este gobierno no respetó. Nosotros estamos trabajando con la Ley de Góndolas en el Congreso para que se abran las góndolas para las Pymes, para que el 30% del espacio sea para las pequeñas y medianas empresas, porque estamos seguros de que podemos abastecer en cantidad y calidad y en precio, y no nos comemos ese relato de que las grandes empresas son competitivas y las pequeñas no. Si ellos fueran más competitivos, emplearían a más trabajadorxs y no lo hacen, así que…
Para los programas de fondo, creo que hay tiempo, lo que viene inmediatamente, es como el triage en una crisis, a quién vas a salvar primero: ¿a la corporación o la PYME? Nosotros no tenemos ninguna duda de que, a las pequeñas y medianas empresas, a los pequeños y medianos productores rurales…
Estuviste con Alberto Fernández en el Patria, ¿cómo fue el encuentro?
En este marco electoral, donde él construye la formula con CFK, que es la Presidenta del Instituto Patria, y nosotros como Comisión, también del Instituto, nos cruzamos cotidianamente. Él hace sus reuniones, nosotros tenemos nuestros esquemas de trabajo. Lo que pasó es que tuvimos un encuentro en el que lo invitamos a participar formalmente, este miércoles 5 de junio, al llamado que hacemos junto con APYME – entre APYME Y ENAC- al inicio de este acuerdo social, para debatir el rol de las pymes en el contexto social y para plantearle, transparentemente, sobre cuál es nuestra mirada junto con 500 empresarios.
Él lo vio bien. Eso fue un contacto chico pero que estamos construyendo muy fuerte. Estuvimos en Chubut, en Neuquén, como te decía antes, los empresarios necesitan sentirse contenidos en la próxima propuesta electoral. Es una necesidad de hace muchos años, no es que pasó ahora porque llegó el macrismo. Se agotaron los tiempos de esperar, reclamamos que Alberto y Cristina Fernández de Kirchner representen a las Pymes, así que ahí estamos construyendo y espero que sea un ida y vuelta.
Desde ENAC construyen también con los medios de comunicación, populares, comunitarios, alternativos. ¿Cuál es tu mirada sobre la comunicación en Argentina actualmente?
Hay rol antirepublicano del macrismo respecto de la comunicación. Cuando digo antirepublicano, hablo de usar toda la pauta del Estado para financiar medios afines y para eliminar todo lo que es voces disidentes, sean del campo popular, sean empresarios de los medios de comunicación que están detenidos, o sea, todo lo que comunicacionalmente no los favorezca usaron los mecanismos de presión para mitigarlos o hacerlos callar.
Lo que es un verdadero ataque a la democracia.
A partir de eso, que se vio rápidamente en este gobierno, los medios de comunicación populares tuvieron un rol muy importante, cada uno con distintas características, muchos de grupos que nacieron en este periodo, otros que tuvieron que recomponerse como Tiempo Argentino, por ejemplo, que pasó de ser un medio privado a un medio cooperativo, y que han logrado de una u otra manera recuperar esta voz que es la de las dos campanas a la sociedad, que todos nosotros podamos ir a elegir distintos medios y escuchar distintas voces, que de eso se trata la democracia, después uno decide.
Ahora, lo que entiendo a mi criterio, es que el campo popular, el campo de medios, no está pudiendo resolver que esos dispositivos comunicacionales sean sustentables. Nosotros no creemos que la pauta deba ser el principal sostén de los medios de comunicación, lo que incluso te condiciona. Por supuesto que debe haber una función del Estado para sostener la pluralidad de voces, pero hay que estudiar a quién se le da pauta en término de periodismo, si vos querés recibir pauta del Estado, tenés que hacer periodismo y el manual de ética del periodismo es este: no mentirás, no matarás… los diez mandamientos… (risas). Si vos querés hacer lobby corporativo en tu medio de comunicación, hacelo pero con tu billetera, no con la billetera del Estado.
Y en el campo popular, de alguna manera también hay que reflexionar, qué pasa que los medios populares no pueden conformar conglomerados de mayor peso específico relativo.
Creo que el campo privado puede hacer un aporte ahí. Las pymes o las empresas nacionales pueden hacer un aporte al financiamiento de esos medios de comunicación, porque tampoco somos ingenuos, hay una relación entre empresas, información periodística y también publicidad o comercialización, no lo podemos negar. Pero vos como medio de comunicación también tenés que generar un producto que sea seductor, para que el empresario pueda hacer una contribución, para que quiera comprar una pauta publicitaria, porque quiere mostrar sus productos y que sus productos se vean. Y, me parece, no estamos sabiendo entender cuál es el rol o como se tiene que adaptar.
Contanos un poco sobre la actividad que realizarán ENAC Y APYME el próximo miércoles 5 de junio en Paseo La Plaza, Sala Picasso…
En la actividad del 5 vamos a entregar los aportes del Empresariado Nacional para la reconstrucción de la Argentina, en un principio, al primer candidato a presidente, Alberto Fernández. Entendemos que los primeros ejes en los que debemos ponernos de acuerdo son los ejes políticos, sobre dónde van a estar los empresarios PYMEs en el mapa de decisiones. Después hay un montón de planes, propuestas e iniciativas que son poco discutidos, porque todos consideramos que van a resolver las cuestiones de fondo como reactivar el mercado interno, crédito blando para la inversión, suspender embargos hasta que las empresas Pymes se puedan sostener; medidas paliativas, pero que a todas ellas hay que ir hilvanándolas con un proyecto político bien claro hacia el futuro.
Es conectado, con un poder adquisitivo alto, es con trabajadores formalizados. Nosotros creemos, como te dije antes, que es con un modelo en el cual estemos todos adentro.