EL MOVIMIENTO ARGENTINO DE SOLIDARIDAD CON CUBA PIDE A MILEI QUE VOTE CONTRA EL BLOQUE EN LA ONU
Por PPV
Con fecha 28 de octubre, el Movimiento Argentino de Solidaridad con Cuba emitió una carta dirigida al presidente Javier Milei en vísperas de una nueva votación en la Asamblea General de las Naciones Unidas en las que se votará finalizar el bloqueo económico, financiero y comercial con el que Estados Unidos somete al país caribeño.
“Desde la primera vez que se expuso a votación, en 1992, la comunidad internacional aprobó masivamente en 32 oportunidades el rechazo a esta acción genocida contra el pueblo cubano.
El bloqueo estadounidense, o “embargo” como le gusta llamar a Washington, contraviene los principios de igualdad soberana y de no injerencia en los asuntos internos de otros Estados, violando flagrantemente la Carta Fundacional de las Naciones Unidas Este bloqueo produce un gravísimo impacto económico y social en la población cubana, afectando todos los ámbitos de su vida, desde la salud hasta la seguridad energética, el transporte, la educación, la alimentación, la vida toda”, sostiene la misiva.»
Más adelante explica que “La suma de las afecciones generadas históricamente por el bloqueo desde 1960 a la fecha, al valor del oro, fue de dos billones ciento tres mil millones de dólares. Estos datos reflejan descaradamente el padecimiento con que los Estados Unidos someten al pueblo cubano.”
Y aprovechan para comentar cuál fue el histórico posicionamiento de Argentina en la ONU: “Argentina históricamente apoyó a Cuba en la O.N.U. votando contra el bloqueo, acompañando invariablemente a la casi totalidad de las naciones del orbe en sintonía con la postura que busca poner fin a este atropello al derecho internacional. Desde las organizaciones y movimientos que impulsamos en Argentina la solidaridad con Cuba, le instamos a que continúe por la histórica senda, la que no ha hecho más que dignificar la política exterior de nuestro país ante la tremenda injusticia que significa este inhumano bloqueo.”
Y recalca que “No respaldar a Cuba en su legítima demanda ante la Asamblea General de la O.N.U. de eliminar el bloqueo de los Estados Unidos, no solo sería un acto ignominioso, sino que configuraría una traición a la causa de Nuestra América y una inaceptable sumisión a los designios del imperio.”