La deuda, Bullrich, la crisis y el verso del narcotráfico
COMBO 2X1: CON UN FMI TE LLEVAS UNAS FFAA
Por María Quintero
Argentina volvió a endeudarse por 50.000 millones de dólares con el Fondo Monetario internacional (FMI) en un crédito «stand by» a 36 meses, según anunciaron el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne y el titular del Banco Central, Federico Sturzenegger. El 30% de los fondos de lo crédito estarán disponibles a partir del 20 de junio, el resto dependerá de la aprobación del directorio del FMI de acuerdo al análisis del proyecto económico que lleve adelante nuestro país.
Es decir que, en un marco en el que crece el descontento social, Argentina apuesta a una vieja receta de endeudamiento que terminará de cocinar el combo de profundización de la crisis y recrudecimiento de las políticas represivas. Si el gobierno reduce el déficit fiscal, podrá agrandar ese combo y recibirá el resto del crédito.
Reducir el déficit fiscal implica, sin dudas, más despidos en el Estado, más tarifazos, más recorte en la ayuda social, más cierres de fábricas y pymes, más despidos en el sector privado. Para llevar adelante estas políticas es necesario que la militarización le dispute las calles al pueblo.
Lo que vendrá: si no son corruptos serán narcotraficantes
Las FFAA, el narcotráfico y el recrudecimiento de la persecución y la represión. Para frenar la protesta social contra las políticas de ajuste, el Gobierno Nacional, de la mano de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, profundizan la estrategia de represión y persecución probada durante 2017. Es que ya el discurso de la corrupción utilizado en los dos primeros años de gobierno para perseguir y encarcelar dirigentes, empieza a mermar su efecto. Ese dedo acusador que apuntaba a la oposición y tiraba de la madeja enmarañada para trazar con el hilo las rutas del supuesto dinero K, termina hoy apuntando a los dirigentes de la Alianza de Cambiemos.
Agotada esta estrategia, Cambiemos emerge con la excusa del narcotráfico. No es que el discurso de la lucha contra el narcotráfico no se haya dado en estos años sino que, por el contrario, estuvo muy bien orquestada desde el Ministerio de Seguridad, y es, justamente, por eso que se vuele muy peligrosa. Con este argumento, el gobierno nacional quiere a las Fuerzas Armadas en la calle y Patricia Bullrich dejó constancia hoy en la Conferencia de Prensa que dio contra la Garganta Poderosa, cómo será la estrategia de represión y persecución.
Dijo la ministra hoy, que la organización social miente en sus denuncias por torturas contra la prefectura, sin embargo tiene 6 prefectos procesados con prisión preventiva por el hecho. Dice que mienten en sus denuncias y que además obstaculizan la tarea de las fuerzas de seguridad porque “no quieren que se combata el narcotráfico”.
Así, Bullrich estigmatiza a la organización, la declara cómplice del narcotráfico y justifica sus torturas, abusos y detenciones a sus integrantes. “La gente nos pide más fuerzas de seguridad en los barrios”, dice la ministra, mientras justifica la militarización y resignifica el argumento “la gente está harta de la corrupción”.
La dignidad no se negocia
En este contexto crítico, el pedido de paro general se hizo escuchar el pasado 25 de mayo en las calles de Buenos Aires con una marcha que convocó a un millón de personas que marcharon contra las políticas de ajuste y represión. Sin embargo, hay una síntesis que no llega. El paro general unificado y organizado – como primera mediad de esa síntesis- por la totalidad de las centrales de trabajadorxs tampoco.
Se avizora por momentos que la paciencia de la araña del pueblo trabajador comenzará a agotarse. Esto parece entenderlo bien un sector del sindicalismo que viene haciendo punta con medidas de fuerza en consonancia con el incremento de la crisis como es el caso del dos CTAs, la Corriente Federal de los Trabajadores, al que se le sumó en este último tiempo el moyanismo de la CGT.
En el día de ayer, ambas CTA – lideradas por Pablo Micheli, Secretario General CTA-Autónoma; Hugo Yasky, Secretario General CTA de los Trabajadores – han resuelto convocar a un paro y movilización el próximo jueves 14 de junio. “La medida se inscribe en el rechazo al ajuste, los tarifazos y la entrega de la soberanía nacional al FMI, así como en la exigencia de paritarias libres, para todos los sindicatos. Las migajas de aumento que el gobierno quiere dar a espaldas de millones de trabajadoras y trabajadores, constituyen un insulto a la dignidad de quienes pretenden vivir decentemente de sus salarios y no del trabajo ajeno”, anunciaron las centrales en un comunicado conjunto.
Aún resta saber cómo seguirá la convocatoria.
Sin embargo, esa misma certeza de que el combo que nos prepara como banquete el macrismo solo nos traerá hambre, también nos pone un paso adelante para patear la mesa, porque si hay algo que sabe el pueblo argentino es fortalecerse en tiempos difíciles.