Falleció Edgardo Form
ADIÓS AL CONSTRUCTOR
Por Beatriz Chisleanschi
“Falleció Edgardo Form”, así de simple y de terrible fue la noticia que circuló por algunos grupos de whatsapp ayer por la mañana y la sorpresa adquirió la misma dimensión que la tristeza. Se fue uno de “esos” que no merecen la muerte.
Edgardo Form presidía el Instituto Movilizador de Fondos Cooperativos y fue un referente indiscutido del asociativismo y el cooperativismo. Era, a su vez, dirigente del Partido Solidario y vicepresidente de la Confederación de Cooperativas de la República Argentina (Cooperar) pero, por sobre todo, un gran humanista y militante por un mundo más justo y solidario.
Docente, egresado de la Escuela Nacional Mariano Acosta, integró la legislatura porteña entre los años 2011 y 2015.
Pero, más allá de los cargos, Edgardo fue un hombre que hacía de la solidaridad su hacer cotidiano. Elegante en su vestir y en su trato con los demás, las puertas de su luminosa y bella oficina del 7° piso del Centro Cultural de la Cooperación Floreal Gorini, estaban siempre abiertas para conversar con él, así como sus manos extendidas para brindar una ayuda a quien lo necesitase. No importaba el motivo por el cual unx se acercaba, en la charla siempre había espacio para profundizar sobre la situación del país o del mundo.
Amaba y sentía un enorme orgullo por ese Centro Cultural que se creó en el año 2002 por impulso de su ex presidente, Floreal Gorini a quien Edgardo admiraba particularmente. “Ingresar aquí es empezar a recibir un baño de cultura universal y sobre todo ser fiel a la frase que figura en una placa que recibe a los visitantes con una frase de Gorini: “El camino hacia la utopía requiere muchas batallas pero sin duda la más importante es la batalla cultural”. -expresó en la entrevista que le realizara para el portal Motor Económico hace unos años atrás.
Con prólogo de Carlos Heller, en el año 2017, Ediciones Desde La Gente publicó Edgardo Form. Un constructor, un libro testimonial que recoge la vida, la palabra y el pensamiento de este amante de los cactus. En la presentación del mismo, el editor Walter Alegre se refirió a esta faceta del cooperativista al señalar que “Edgardo es como el cactus, es un ejemplo de virtud y de permanencia, resiste como el tiempo, se endurece sin perder la ternura”, en tanto, la periodista y escritora Ana María Ramb apeló a la lectura de escritos de Fernando Pessoa y de Jean-Baptiste Moliere para describirlo “dice lo que piensa. Un pensamiento crítico, sumamente agudo, regado de ironía y humor” –sintetizó.
Edgardo Form, un tipo querible y que llevaba la cooperación como bandera: “Hay que cambiar el mundo para salvarlo. El camino es el de la solidaridad, sin solidaridad no hay futuro. Para ello el cooperativismo aporta su experiencia y realizaciones. Hay que impulsar la economía solidaria con los valores que nutre los ideales de la cooperación”. -expresó en la presentación de su libro.
Ayer decidió emprender un largo viaje, sin pedir permiso se fue. Desde ayer, el mundo es un poco más injusto.